Secadora para manos propias de lino

La ropa de cama a menudo se seca en un apartamento, lo que significa que debe tener un lugar especial para esto. Alguien estará satisfecho con las cuerdas estiradas en el baño, alguien comprará un dispositivo caro en la tienda, la pared o el techo, y alguien pensará en cómo hacer una secadora para la ropa por su cuenta. Si usted es uno de los que le gusta mostrarse creativamente, mire cómo se ve la secadora de ropa original, hecha con sus propias manos.

Para el trabajo necesitarás:

  1. Comencemos con la preparación de la parte móvil de la secadora. Mida y corte las barras desiguales: cuatro piezas para ensamblar el marco. Luego corte cuatro largos de la misma longitud de las varillas de madera. En las vigas de madera con un taladro hacemos surcos donde se insertarán las varillas.
  2. Insertamos firmemente las barras para obtener una rejilla fuerte, porque en una secadora de este tipo, no solo se colgarán cosas livianas. Para facilitar el montaje, las barras se pueden estrechar en los extremos, ligeramente biseladas.
  3. Ahora miramos, si el secador casero para la ropa se vuelve igual, si todas las vigas transversales son paralelas, si todas las varillas están bien fijadas, luego fije las barras superior e inferior con clavos usuales o tornillos autorroscantes.
  4. Tomamos un tablero que se adjuntará a la pared, lo ajustamos para que se ajuste a la parte ya hecha - el ancho es igual, y la longitud del tablero debe ser más de 10-15 cm. Unimos ambas partes con un bucle de muebles.
  5. Además, el diseño se puede pintar con el color que sea apropiado en su interior. Después de que la pintura se haya secado, agregamos la secadora para la ropa con los elementos funcionales necesarios. Primero, arreglamos el candado en la parte superior.
  6. En segundo lugar, desde el lado atornillamos el mecanismo de plegado. Su tamaño y ángulo de conexión dependerá de la cantidad de espacio, por ejemplo, en el baño puede ser ocupado por un secador.
  7. En la parte inferior del tablero, marque tres puntos a intervalos iguales, haga pequeños agujeros en los puntos y fije las perillas de los muebles o los ganchos convencionales en ellos.

La ventaja más básica es que tal secado para la ropa, hecho con sus propias manos, es fácil de llevar y no ocupa lugar en el piso o en el gabinete cuando no se usa.

También este diseño, cuando las cosas no se secan en él, se puede utilizar como una percha o un porta toallas.