¡10 hechos que prueban que las hormigas son como las personas!

La civilización de las hormigas revela todos los secretos de la sociedad humana ...

Entre los científicos de todo el mundo hay largas disputas sobre si el intelecto posee insectos que claramente no son similares a los mamíferos superiores. Debido a su tamaño, hábitos y ciclo de vida, la mayoría de las personas ni siquiera tienen la idea de que están desarrolladas y viven de acuerdo con leyes que están cerca de los principios de la sociedad humana. En la actualidad, los especialistas han encontrado al menos 10 pruebas de que los insectos son terriblemente similares a la raza humana.

1. Desarrollo de una civilización de hormigas

Así como la sociedad de las personas evoluciona, la vida en un hormiguero cambia. En las primeras etapas de su aparición, las hormigas se confunden y construyen caóticamente la "base", usando para este propósito todas las huellas. Cuanto más largo es el hormiguero en un lugar, más completa será su reparación y reconstrucción. Las hormigas modifican su vivienda, ajustándose a la dirección del viento o al crecimiento de las plantas cercanas.

2. Disponibilidad de varias profesiones

En el comienzo de su aparición, las tribus, y luego los estados fueron creados sobre la base de la división del trabajo. Así como la misma persona no puede ser buena al mismo tiempo en todas las profesiones existentes, las hormigas tampoco pueden reemplazarse en el trabajo diario en un hormiguero. Los "cortadores de hojas" recogen hojas, producen compost y cultivan setas, que se alimentan de sus hermanos. Las "hormigas de barril" son capaces de aumentar varias veces de tamaño, porque su abdomen sirve como depósito de miel "para un día lluvioso". "Segadores" muelen el grano y les dan de comer larvas.

3. Solo las hormigas y los humanos son capaces de mantener mascotas

En toda la diversidad de la naturaleza, solo dos criaturas pueden tener mascotas y cuidarlas. Así como una persona tiene una vaca o una oveja, las hormigas "domestican" a los áfidos: cortan sus alas y pastan todos los días. Los áfidos producen una masa dulce y viscosa, que los insectos comen. Para el invierno, los áfidos son empujados a las profundidades del hormiguero para evitar su muerte por el frío.

4. Levantamiento de esclavos antis

El humano y la hormiga están unidos por una cualidad más: la libertad de amar. Los dueños de hormigas esclavas colonizan otras especies de parientes y los esclavizan. Los "esclavos" se ocupan de los hijos de los ganadores, pero periódicamente levantan sublevaciones. La razón es sorprendentemente reminiscente de la relación entre los gobernantes y los esclavos en los estados antiguos: en tiempos de hambre o sobrepoblación de la colonia, son los "esclavos" quienes son infringidos sobre lo que comienzan a oponerse. Los iniciadores del levantamiento entre las hormigas son asesinados o expulsados ​​del hormiguero.

5. Continuidad de poder

Los insectos se acercan a los gobernantes de forma más responsable que algunas personas. Cada hormiguero está gobernado por el "útero" - la reina, a la cual las hormigas de cualquier nivel están sujetas. Tiene una función importante: llegar a la pubertad, la reina, que se distingue de otros insectos por la presencia de alas, se va volando para encontrar un nuevo hormiguero. Habiéndose apareado con un macho, ella muerde sus alas y pone huevos. Pasa varios meses esperando la aparición de las larvas de las hormigas trabajadoras que la servirán y construirán un gran hormiguero.

6. Elecciones

A menudo en una colonia hay varias reinas. Este fenómeno se llama poliginia: durante un tiempo logran administrar el hormiguero juntos, pero tarde o temprano hay conflictos. Una vez que las escaramuzas se vuelven regulares, las hormigas obreras organizan peleas por ellas, de las cuales solo una reina es la ganadora. El resto son expulsados ​​o asesinados, considerados no aptos para gobernar.

7. Pereza patológica

Tanto entre las personas como entre las hormigas, alrededor del 20% de las personas nacen libres de iniciativa, no están dispuestas a esforzarse para obtener ningún beneficio. No cambian, incluso si se les priva de alimentos y apoyo de sus compañeros, por lo que la sociedad condena su existencia inútil. Si las personas simplemente evitan el contacto con tales conocidos, entonces las hormigas actúan de acuerdo con la forma popular en su tipo de castigo: la expulsión.

8. Caza colectiva

Las personas primitivas manejaban mamuts y otros animales grandes, uniéndose en grupos. Las hormigas están familiarizadas con este estilo de ataque: en África viven una raza grande, que se llama extraviada. Viajan por el continente en muchos miles de colonias y no tienen miedo de cazar elefantes o cocodrilos. En México, un tipo similar de migración hace que las personas temerosas dejen sus hogares, para no ser mordidas ni comidas con vida.

9. Habilidades de cultivo de plantas

Las hormigas sudamericanas parecen haber aprendido de las personas a cultivar cereales comestibles, controlar el nivel de humedad y aflojar el suelo. Cuidadosamente llenan el suelo con grietas en los troncos de los árboles, recogen las semillas en los campos y las "plantan" en plantaciones improvisadas. Para la siembra, no solo se usan árboles, sino también el área libre alrededor del hormiguero. La cosecha es recolectada por "segadores" o hormigas esclavas.

10. Construcción de ciudades

Las hormigas no solo viven en colonias: ennoblecen su hábitat. En América del Norte, una especie vive como Atta, que construye ciudades subterráneas con túneles y carreteras. Las tiendas en la calle adornan las marquesinas, protegiendo los accesos a la ciudad de las inundaciones bajo la lluvia.