Cáncer del duodeno: los primeros síntomas

En las primeras etapas es difícil detectar casi cualquier tumor maligno, ya que no se manifiesta hasta que alcanza un tamaño grande o evita la metástasis en los tejidos vecinos. Uno de los diagnósticos diferenciales más difíciles es el cáncer duodenal: los primeros síntomas son prácticamente indistinguibles de los neoplasmas oncológicos del páncreas, otras partes del intestino y los conductos biliares comunes. Además, este tipo de cáncer rara vez es primario, a menudo se desarrolla debido a la germinación de los tumores de los órganos cercanos.

Síntomas del cáncer duodenal en una etapa temprana

La neoplasia maligna crece muy lentamente y puede no manifestarse durante varios años e incluso décadas. En casos raros, los pacientes notan ardor de estómago periódico, náuseas leves, cambios en el apetito. Pero, como regla general, estos signos no están asociados con el cáncer duodenal, sino que se atribuyen a patologías menos peligrosas del tracto digestivo, por ejemplo, gastritis o colitis, úlcera péptica.

En el futuro, los siguientes síntomas de cáncer:

Como puede ver, cualquier manifestación clínica temprana de este tipo de tumor es común a muchas otras dolencias del tracto gastrointestinal.

Los primeros signos específicos de cáncer duodenal

Las características de la patología considerada son 3 síntomas:

  1. Síndrome de dolor Debido al crecimiento del tumor, las raíces nerviosas se comprimen. Como resultado, se siente dolor en el epigastrio y el hipocondrio derecho, irradiando en la parte inferior de la espalda y la espalda.
  2. Ictericia mecánica El proceso patológico ocurre debido a la oclusión del conducto biliar. Además de cambiar el tono de la piel, las heces se vuelven más claras y la orina se oscurece.
  3. Picazón de la piel. El síntoma se observa inmediatamente después del inicio de la ictericia. Es provocado por un aumento en la concentración de bilirrubina en la sangre, así como por la irritación de los receptores de la piel con el ácido biliar.