Agave - cuidado en el hogar

Al igual que la mayoría de todas las suculentas, la planta medicinal de agave no necesita cuidados especiales. Un agave nefasto no se puede llamar exactamente. El cuidado de agave en casa es simple. Vamos a describir esto con más detalle.

Descripción breve

La descripción de la planta comienza con el hecho de que el agave es una planta herbácea perenne enraizada con un tallo subdesarrollado o muy corto. El agave puede tener un color diferente de hojas, desde el azul hasta el verde claro. Depende de la especie de planta, que asciende a unos trescientos. Las hojas de las hojas adornan el sólido subulado o dentículos denticulados de color marrón. En la naturaleza, perenne puede crecer hasta cinco metros de altura, y en casa rara vez supera los cincuenta centímetros. Por cierto, la altura de las especies enanas puede ser de solo tres centímetros. El agave crece lentamente, pero florece solo una o dos veces con un intervalo de diez a veinte años.

Características de cuidado

Si quieres cultivar esta casa perenne, asegúrate de que la maceta con la planta esté en un lugar bien iluminado. Esta suculenta responde muy bien a la luz solar directa. Con respecto a la temperatura óptima, entonces se mantiene en un nivel de 18-28 grados. En verano, el agave se puede plantar en el suelo. Tenga en cuenta que las temperaturas inferiores a +10 grados para la mayoría de las especies de agave son fatales.

Riega la planta cuidadosamente. Una o dos veces por semana para el agave será suficiente, y en invierno el riego se reduce a una vez al mes. Si la humedad en la olla se estanca, entonces las raíces comenzarán a pudrirse, lo que conducirá a la muerte de plantas perennes. ¡Cuando riegue, asegúrese de que la humedad no entre en el centro de la roseta de la planta!

En la primavera, el agave se puede alimentar con mezclas especiales de cactus, que contienen una cantidad mínima de nitrógeno. En invierno, elimine la planta de cualquier tipo de fertilizante. Si la planta se ve afectada por enfermedades o plagas, se deben tomar medidas inmediatamente, ya que las plantas perennes pueden perecer. Al golpear con un escudo o trips, que representan el mayor peligro, trate la suculenta con un disco de algodón humedecido con vodka, alcohol o cerveza. Sin embargo, solo una solución especial de "Aktellik" ayudará a salvar el agave, si la lesión es de naturaleza masiva. Una buena herramienta preventiva: limpiar las hojas con una solución de jabón o agua con la adición de varios dientes de ajo.