Cepillos de dientes para bebés

El cuidado de los dientes del niño debe comenzarse a una edad muy temprana. El cuidado insuficiente o inadecuado de los dientes de leche puede causar serios problemas con la salud de los dientes permanentes en el futuro. Entonces, los padres no deben descuidar un problema aparentemente insignificante, como el cuidado adecuado de los primeros dientes del bebé.

En este artículo analizaremos los cepillos de dientes para bebés y niños, analizaremos sus características y diferencias de los cepillos "para adultos", hablaremos sobre cómo almacenarlos y con qué frecuencia cambiaremos el cepillo de dientes para no apartarlo de un asistente para mantener la boca limpia hasta la fuente de peligros bacterias.

Las características principales de los cepillos de dientes infantiles

Los cepillos de dientes comunes, diseñados para ser utilizados por adultos, no son adecuados para niños. Son demasiado grandes, y sus cerdas son demasiado rígidas para el niño y pueden incluso rasguñar las encías y causar sangrado. Los cepillos para niños se fabrican solo en esta categoría de dureza: "suave". Ningún otro (ni "medio", ni siquiera "duro", utiliza indeseable). La cabeza del cepillo debe ser redonda, sin bordes afilados o esquinas, para no dañar la membrana mucosa de la boca y las encías de las migas. El tamaño de la cabeza se elige individualmente: debe tener aproximadamente la misma longitud que el tamaño de dos o tres dientes de niños. El tamaño más común de la cabeza del cepillo de un niño es de 18-25 mm de longitud y aproximadamente 8 mm de ancho. Dependiendo de la forma de la cabeza, las cerdas se pueden organizar en tres, cuatro filas o en un círculo. Muy a menudo en los cepillos de dientes infantiles hay manchas de color. Esto no es solo una solución de diseño, estas etiquetas ayudan a identificar al bebé la cantidad de pasta de dientes necesaria para cepillarse los dientes. A pesar del deseo de la mayoría de los padres de comprar a sus hijos todo lo que sea natural, es mejor comprar un bebé con un cepillo con cerdas sintéticas (con las puntas de las cerdas necesariamente deben molerse): es más higiénico. También es importante prestar atención al mango: debe ser lo suficientemente voluminoso y tener un recubrimiento antideslizante para que quepa cómodamente en la palma de la mano del niño. Para los más pequeños, los dentistas recomiendan los cepillos de dientes de silicona (se pueden usar incluso como abstemios para los dientes), Los niños mayores son adecuados para pinceles especiales para niños con un mango cómodo y una forma especial de cepillo. Para elegir qué cepillo de dientes y pasta de dientes es mejor para su bebé, consulte a un dentista.

No menos importante es la técnica de limpieza adecuada. Al principio, ayude al niño a cepillarse los dientes, muestre en qué movimientos se limpia los dientes y verifique que el bebé esté justo detrás de usted.

Enseñar a los niños a cuidar sus dientes desde la infancia, mostrándoles su propio ejemplo correcto. Solo de esta manera ayudará a la migaja para evitar muchos problemas graves con su salud dental en el futuro.