¿Cómo uso el lavavajillas?

Es un deseo bastante natural de una mujer moderna no lavar los platos. La presencia de un lavavajillas en la casa le permite no pararse sobre el fregadero, porque esta unidad está haciendo frente a la tarea perfectamente, prácticamente sin la participación de los propietarios. De usted solo necesita cargar los platos, agregar detergente, y luego sacar las tazas limpias de las placas y colocarlas en su lugar. Sin embargo, no todos los propietarios recientemente descubiertos de tales equipos saben cómo usar adecuadamente el lavavajillas.

Instalación de lavavajillas

El interior del lavavajillas se compone de varios cestos enrejados para varios platos, entre los cuales hay roqueros giratorios con boquillas de agua. Calienta el agua del calentador, montada en el fondo de la máquina, y un dispositivo especial ablanda el agua, evitando la formación de incrustaciones en el elemento calefactor. En la parte inferior de la máquina hay un filtro, en el que la comida permanece después del lavado, debe limpiarse después de cada uso de la máquina.

Funcionamiento del lavavajillas

Antes de cargar los platos sucios en la máquina, es necesario eliminar los residuos de comida de manera que el filtro esté menos obstruido. Para el lavado de calidad de cacerolas y sartenes, algunos modelos de máquinas tienen la función de remojar previamente. Si su unidad no tiene dicho régimen de lavado, entonces puede usar píldoras especiales que efectivamente lavan el depósito.

Tiene sentido antes de lavar por un tiempo corto mantener los platos sucios en un recipiente con agua caliente o debajo de un grifo. Por lo tanto, ahorrará significativamente el consumo de agua y electricidad durante la operación del lavavajillas.

Los platos para el lavavajillas pueden ser de cualquier tipo, a excepción de madera o uno que es susceptible a altas temperaturas, es importante cargarlo correctamente para el lavado. Las placas y las copas ponen la parte inferior hacia arriba, porque el agua batirá desde abajo y limpiará mejor toda la suciedad. Los cubiertos deben colocarse en una bandeja especialmente diseñada para facilitar el flujo de agua. Y no cargue demasiado la máquina, por lo que la calidad del lavado se reduce significativamente.

Elija con cuidado un ciclo de lavado, teniendo en cuenta las características de los platos cargados y el resultado deseado. Es mejor lavarse los vidrios frágiles en modo moderado, y los platos y tazas habituales no son un lavado terrible e intenso. Y, por supuesto, no olvide que la máquina solo puede funcionar con detergentes especiales destinados a ser utilizados en dicha técnica.