¿Cuándo puedo darle hígado a mi bebé?

A los seis o siete meses, la mayoría de los bebés ya están listos para familiarizarse con la comida para adultos. Por supuesto, los alimentos complementarios se seleccionan cuidadosamente, y el tratamiento térmico se lleva a cabo en consecuencia. Cuando la migaja ya está familiarizada con los purés de verduras , frutas y carne, muchas madres se preguntan cuándo será posible darle hígado al bebé. El valor nutricional de este subproducto es innegable. La principal ventaja del hígado es su capacidad para fortalecer la inmunidad, ya que su consumo regular de alimentos ayuda a aumentar el nivel de hemoglobina en la sangre. Y esto, a su vez, ayuda al cuerpo a luchar contra infecciones y virus.

Límites de edad

No existe una opinión común sobre la edad a la que se puede administrar el hígado a los niños. Algunos pediatras creen que a la edad de seis meses este producto será absorbido por completo por el organismo del niño. Otros creen que es necesario esperar hasta que el tracto gastrointestinal del bebé se fortalezca, se acostumbre a la comida para adultos y recomiende que ingrese al hígado antes de los ocho meses. También hay un grupo de médicos que están seguros de que el hígado es un producto, el daño potencial de su uso excede los beneficios. Su opinión se basa en el hecho de que este órgano en el cuerpo realiza la función de un filtro, y la madre que compró el hígado no puede saber qué estaba alimentando el animal.

Reglas de cocina

Si no tiene la pregunta de si un niño de un año puede recibir hígado de ternera, pollo o conejo y ya ha tomado una decisión, debe conocer una serie de normas que se refieren a la preparación de este producto. Primero, la opción más aceptable es el hígado de ternera (o ternera). Es suave e hipoalergénico, a diferencia del pollo. En segundo lugar, antes de su consumo, el producto debe hervirse, y luego limpiar varias veces a través de un colador (puede usar una picadora de carne). No a todos los bebés les gusta el sabor específico de este producto, por lo que se recomienda agregar el hígado en puré de avena o vegetal. Si no tiene tiempo para preparar el hígado, puede usar el puré de patatas listo para usar.