Encefalitis en perros: síntomas

La encefalitis en perros surge de la picadura de un ácaro encefalítico y es una inflamación del cerebro, que a menudo va acompañada de una lesión de la médula espinal. La derrota simultánea del cerebro y la médula espinal se llama encefalomielitis. Y si los caparazones del cerebro están involucrados en el proceso, estamos hablando de meningoencefalomielitis.

Síntomas de encefalitis transmitida por garrapatas en perros

La inflamación del cerebro se manifiesta en perros en forma de convulsiones , parálisis, debilidad general, temblores severos, maniobras. Esta es una manifestación externa del hecho de que se forman focos de necrosis, infiltrados purulentos en el cerebro, cambios distróficos en las células nerviosas y edema cerebral.

Los síntomas de encefalitis en un perro después de una picadura de garrapata se manifiestan con mayor frecuencia en el período de primavera-verano, ya que el vector de la enfermedad es más activo en este momento. El peligro de tal enfermedad está en la reacción instantánea del organismo, especialmente si el animal está inmunocomprometido.

La infección ocurre instantáneamente, 3-7 minutos después de la mordedura. El período de incubación puede durar 3-3,5 semanas, pero si la mascota en los primeros 2-3 días después de la mordedura no ha recibido el tratamiento adecuado, no se puede evitar la muerte.

Si observas síntomas de encefalitis en el perro, un aumento brusco de la temperatura , convulsiones, parálisis de las extremidades, funciones motoras deficientes, sensibilidad a cualquier dolor, cambios repentinos de humor, parálisis completa de los ojos y músculos faciales, probablemente ya llegues tarde con ayuda.

Incluso con el tratamiento más efectivo, tales síntomas neurológicos graves de la encefalitis transmitida por garrapatas en perros indican una condición descuidada de la enfermedad, y el pronóstico puede ser decepcionante. Todos los efectos devastadores de la inflamación cerebral son simplemente irreversibles, para que el perro superviviente pueda perder sus funciones, temporal o permanentemente.

El animal está amenazado solo por la restauración parcial de las funciones perdidas, además, después de la enfermedad transferida, se vuelve altamente susceptible a todo tipo de infecciones virales, y esto aumenta el riesgo de recurrencia de la enfermedad.

El tratamiento de la encefalitis y sus síntomas en perros consiste principalmente en la prescripción de medicamentos antimicóticos, antibacterianos y antihelmínticos. La terapia se acompaña de la ingesta de hormonas glucocorticoides, aminoglicosidonas y otros agentes. Después del tratamiento, un curso de terapia restaurativa es obligatorio.