Cualquier decoración de botellas: siempre es posible dar una segunda vida a los recipientes de vidrio ordinarios, para permitir que se conviertan en parte del interior, para transformar una bebida alcohólica común en algo único e irrepetible. Hay muchas opciones para decorar botellas: pintura acrílica, nueces o cáscaras de huevo , granos de café, servilletas en técnicas de decoupage, sémola e incluso papel de periódico. Sugerimos que comience a decorar las botellas con una cuerda o un hilo grueso. Tales productos encajan perfectamente en el interior de la casa en estilos clásicos y país. Las botellas vacías, decoradas con hilo, pueden servir como un recipiente para embotellar bebidas durante una fiesta doméstica, ser un jarrón inusual para un pequeño ramo o simplemente un elemento de la decoración de la habitación. Y si decora una botella con un licor, será un gran regalo o repondrá su propio bar y será su exhibición original.
Cómo decorar una botella con un cordel?
Para crear cada "obra maestra" de hecho a mano, necesitarás:
- bramante, se puede comprar en tiendas de arte o ferreterías;
- alcohol para desengrasar la botella;
- pegamento caliente o momento de pegamento
Como regla general, la tecnología de decoración de una botella con hilo es simple y bastante posible para los principiantes en cualquier tipo de decoración. Primero, la superficie de la botella debe desengrasarse con un disco de algodón humedecido en alcohol o acetona. La decoración de una botella con una cuerda generalmente se inicia con una cuerda en la parte inferior. Primero, toda la superficie del fondo debe estar cubierta con pegamento. Doblando la punta del hilo, enrolle la parte inferior en un círculo, comenzando desde el centro. No olvides tener en cuenta que el cordel se extiende de manera uniforme y apretada. El hilo debe pegarse en la parte inferior de la parte inferior para una mejor estabilidad de la botella.
Luego, debes pegar el cordel alrededor del círculo de la botella desde abajo hacia arriba.
Como puede ver, decorar botellas con cordel no es nada difícil, ¡pero qué resultado más sorprendente!