Signos de parálisis cerebral en recién nacidos

La parálisis cerebral es un grupo de enfermedades causadas por daño cerebral, el sistema nervioso central, la función motora y muscular deteriorada, la coordinación del movimiento, el habla y el retraso mental. Naturalmente, la puntuación de dicho diagnóstico después del nacimiento del bebé sorprende a los padres. Después de todo, en la sociedad moderna, la parálisis cerebral se considera un veredicto.

Las causas de la parálisis cerebral en los recién nacidos pueden ser varios factores:

  1. El curso severo del embarazo en la madre, así como las enfermedades que sufrió en el primer trimestre, cuando la colocación de todos los órganos y sistemas del futuro bebé.
  2. La parálisis cerebral en recién nacidos también ocurre debido a la infección intrauterina con infecciones urogenitales. Además, las enfermedades interrumpen la función de la placenta, como resultado de lo cual el bebé recibe menos oxígeno y nutrientes.
  3. Partos complicados con un período largo anhidro, un cordón del cordón umbilical que causa hipoxia en el niño.
  4. La ictericia prolongada o complicada ocasiona daño cerebral al recién nacido con bilirrubina.
  5. El diagnóstico precoz de la enfermedad permite obtener mejores resultados en el tratamiento. Es por eso que es importante saber cómo determinar la parálisis cerebral en los recién nacidos.

Parálisis cerebral en recién nacidos: síntomas

A pesar de que el diagnóstico de parálisis cerebral en recién nacidos es realizado por un médico sobre la base del examen físico y el examen del cerebro del niño (ultrasonido, tomografía), en muchos casos fueron las observaciones de los padres las que permitieron la sospecha de la enfermedad. La nueva mamá tiene más tiempo con el niño, y es ella quien puede sospechar lo incorrecto y decirle al médico. Para la parálisis cerebral, los recién nacidos se caracterizan por:

  1. Retraso en el desarrollo físico. El niño no pierde reflejos no condicionados (por ejemplo, palmar-oral y reflejo de la marcha automática), se eriza la cabeza, se da vuelta, comienza a arrastrarse.
  2. Violación del tono muscular en la parálisis cerebral en recién nacidos. Todos los bebés nacen con el tono muscular de las extremidades, pero normalmente la hipertensión de los brazos se debilita a 1,5 meses y las piernas a 3-4. En la parálisis cerebral, los músculos de la miga quedan demasiado apretados o, por el contrario, son lentos. Vale la pena prestar atención al movimiento de migas: en la parálisis cerebral son agudas, repentinas o vermiformes, lentas.
  3. Retraso en el desarrollo psicoemocional. En la parálisis cerebral, el recién nacido no sonríe un mes, y en dos no camina.
  4. Asimetría del cuerpo Hay una asimetría en el tono muscular, cuando una manivela es tensa y la otra está relajada e inmóvil. El bebé maneja mejor un mango o pierna. Diferentes espesores o longitudes de extremidades son posibles.
  5. En un recién nacido con parálisis cerebral, hay convulsiones, pestañas, paradas repentinas de la vista.
  6. Los niños con parálisis cerebral, por lo general, son muy inquietos, duermen mal, succionan débilmente el pecho.

El diagnóstico precoz brinda a los padres la oportunidad de obtener el pronóstico más iridiscente con respecto al éxito del tratamiento.