El verano es el momento más adecuado para templar el cuerpo de un niño. Sin embargo, para que todos tus esfuerzos no sean en vano y el niño no se encuentre en la cama con un resfriado, debes conocer algunas reglas y posibles formas de templar a los niños durante el verano.
Reglas de templado para niños:
- comience a endurecerse tan pronto como sea posible (los procedimientos de salud se pueden llevar a cabo de 6 a 7 días de la vida del niño de común acuerdo con el pediatra);
- los procedimientos de endurecimiento deben llevarse a cabo sistemáticamente;
- aumente gradualmente el tiempo del procedimiento, empezando desde unos pocos minutos;
- asegúrese de que el niño no se congele con agua fría o, por el contrario, no se sobrecaliente al sol;
- Los procedimientos generales para atemperar a los niños en el verano se deben combinar con ejercicios físicos y masajes;
- elegir correctamente la ropa y los zapatos del niño: deben coincidir con la temperatura del aire, y también estar hechos de telas y materiales naturales;
- lo mejor es llevar a cabo procedimientos de endurecimiento en forma de juego y entretenimiento.
Cómo atemperar a un niño en el verano?
Los principales factores de endurecimiento son naturales y de fácil acceso: aire, agua y sol.
El principio de templar a los niños con aire se basa en el efecto de las gotas de aire en la piel del bebé. Para hacer esto, es suficiente permitir que el niño pase tanto tiempo como sea posible al aire libre. Las caminatas de verano deben durar al menos 3-4 horas por la mañana y por la noche, evitando el calor del sol durante el almuerzo. Además, la habitación de los niños debe ventilarse regularmente cuando no haya niños.
La forma más efectiva de fortalecer la inmunidad de los niños en edad preescolar es endurecerse con agua fría. Comience a nadar en cuerpos de agua naturales para el niño en clima tranquilo sin viento, a una temperatura del aire de no menos de + 25 ° y agua + 23 °. Además, los primeros procedimientos de agua no deberían ser largos, no más de 3-5 minutos,
Un excelente efecto para la salud se obtiene templando a los niños con el sol. El sol de la mañana fortalece la inmunidad de los niños y también satura el cuerpo del niño con vitamina D esencial . Lo más importante: no olvides ponerle una panama a un niño o asegurarte de que su cabeza esté a la sombra.