Trombocitopenia autoinmune

Mala nutrición, vida en estado de estrés, deterioro del medio ambiente: todo esto afecta la salud de una persona, no para mejor. Como resultado, la enfermedad causada por la falla de un sistema en particular en el cuerpo se volvió más frecuente. Estos incluyen trombocitopenia autoinmune (idiopática) o enfermedad de Verlhof.

Tipos y causas de trombocitopenia autoinmune

Esta es una enfermedad de la sangre, en la cual el número de plaquetas se reduce debido al hecho de que la inmunidad comienza a producir anticuerpos contra este grupo de células. La trombocitopenia autoinmune ocurre:

Síntomas de trombocitopenia autoinmune

Un signo característico del desarrollo de esta enfermedad es la aparición de hemorragias múltiples en forma de pequeños puntos. Muy a menudo se encuentran en la piel del tronco y las extremidades. También pueden comenzar erupciones hemorrágicas. Además, hay una hemorragia de la mucosa en las cavidades oral y nasal.

Dado que las plaquetas son responsables de la coagulación de la sangre, significa que con dicho diagnóstico, si la piel está dañada, el sangrado no se puede detener por mucho tiempo. Esto también afecta el hecho de que los períodos menstruales de las mujeres son más abundantes y en las heces hay sangre.

Si no se observaron complicaciones irreparables (por ejemplo, hemorragia cerebral), el pronóstico para los pacientes con trombocitopenia autoinmune es optimista. La enfermedad pasará sola o la recuperación vendrá como resultado del tratamiento.

El tratamiento de la trombocitopenia autoinmune

El principal tratamiento para la trombocitopenia autoinmune tiene como objetivo suprimir la producción de autoanticuerpos que destruyen las plaquetas, pero en primer lugar debe ser diagnosticado. Para esto, se deben enviar una serie de pruebas:

Con un leve grado de trombocitopenia autoinmune, se recetan medicamentos hormonales del grupo de los glucocorticoides (la mayoría de las veces prednisolona a razón de 1 mg por kg de peso corporal). Tomarlo requiere una recuperación completa y luego reducir gradualmente la dosis. Si tal terapia no ayuda, los médicos realizan una operación para extirpar el bazo.