Tuberculosis primaria

La tuberculosis es una enfermedad infecciosa común asociada con la penetración del bacilo de Koch (micobacterias) en el cuerpo. Existen varias formas de esta patología que difieren en el tipo de tratamiento, pronóstico, posibles complicaciones, etc. Considere cuál es la forma primaria de tuberculosis, cuáles son sus características, manifestaciones y complicaciones.

Tuberculosis pulmonar primaria

Esta forma de la enfermedad se diagnostica con más frecuencia en niños, pero también a veces ocurre en adultos. La tuberculosis primaria, o infección primaria con tuberculosis, es el resultado de la entrada en el cuerpo de un patógeno, que el organismo no ha encontrado antes. Por lo tanto, los tejidos muestran una alta sensibilidad a las micobacterias y sus toxinas.

Al llegar a los pulmones, las varillas de Koch en este caso comienzan a desarrollarse y multiplicarse activamente. En este caso, como regla, se forman lesiones únicas o múltiples, rodeadas por una capa de células protectoras del sistema inmune. Los sitios de inflamación aumentan rápidamente, y pronto el proceso patológico involucra los vasos linfáticos y los ganglios linfáticos de la raíz del pulmón.

Muy a menudo, se observa un resultado favorable de la enfermedad: la inflamación se centra independientemente en cicatrices y cicatrices, dejando atrás cápsulas del tejido conectivo en las que se depositan las sales de calcio después de un tiempo. En tales brotes, los palos Kokh pueden permanecer inactivos durante un tiempo prolongado, cuya probabilidad de activación es del 10%. A menudo, los focos curados se encuentran en personas sanas con diagnóstico de rayos X, lo que indica una enfermedad transferida previamente.

Signos de tuberculosis primaria

El cuadro clínico de esta forma de la enfermedad es muy débil y no siempre. Solo unos pocos pacientes pueden observar tales signos:

Complicaciones de tuberculosis primaria

Las complicaciones de la patología son posibles en pacientes con inmunidad débil, así como con enfermedades graves concomitantes (azúcar diabetes, infección por VIH, alcoholismo crónico, etc.). La lista de complicaciones incluye: