Absceso de garganta

Un absceso en la garganta es un diagnóstico muy peligroso que requiere intervención médica inmediata. Absceso, o absceso, es una cavidad con contenido purulento, cubierto con una capa de tejido de granulación. La inflamación purulenta en la garganta surge de un proceso infeccioso que puede desarrollarse en diferentes partes de la garganta:

Sin un tratamiento adecuado oportuno, el absceso de la garganta puede conducir a estenosis de la laringe y asfixia, a infección en los tejidos profundos del cuello y en la cavidad torácica, al desarrollo de la sepsis.

Causas de absceso de garganta

El agente causal de la enfermedad es con mayor frecuencia la microflora patógena mixta, la mayoría de los cuales puede estar representada por estreptococos y estafilococos. Pueden unirse:

Las razones para el desarrollo de un absceso de garganta pueden ser las siguientes:

1. Un tratamiento inadecuado, inadecuado o inadecuado de una enfermedad infecciosa-inflamatoria:

2. Penetración de microorganismos piógenos con adherencia insuficiente a las reglas asépticas y antisépticas durante las manipulaciones médicas:

3. Traumatización de la mucosa faríngea, daño mecánico:

Los siguientes factores contribuyen a la aparición de la enfermedad:

Síntomas de un absceso en la garganta

La enfermedad, como regla, se manifiesta casi de inmediato. El absceso purulento en la garganta puede ser reconocido por tales signos:

Cuando se siente la garganta en el área afectada, se observa un tumor, así como también sellos en la piel, ganglios linfáticos agrandados y un aumento de la temperatura de la piel. Con la apertura del absceso, su avance y la liberación de contenido purulento, el estado de salud mejora, el dolor disminuye.

¿Cómo tratar un absceso de la garganta?

Los pacientes que son diagnosticados con un absceso en la garganta son hospitalizados. El tratamiento incluye intervención quirúrgica, a saber, abrir el absceso, limpiarlo y desinfectarlo La cavidad se lava adicionalmente durante varios días. La operación se realiza bajo anestesia local. En casos más severos, así como con acceso difícil al absceso, puede ser necesario eliminar el absceso junto con la amígdala.

El tratamiento farmacológico con absceso de garganta requiere el nombramiento de antibióticos, así como de agentes antiinflamatorios, antiedematosos, anestésicos y antipiréticos. Además, se recomienda el uso de medicamentos inmunoestimulantes y vitaminas. Después de la supresión de los procesos inflamatorios, se pueden prescribir procedimientos fisioterapéuticos.