"Como una mujer quiere" - una revisión del libro de Emily Nagoski

Clase magistral sobre la ciencia del sexo de un psicólogo experimentado

¿Por qué perdemos interés en el sexo? ¿Cómo rellenar el "pozo del deseo"? ¿Puedo aprender a obtener más placer de la intimidad? Las respuestas a estas preguntas las brinda la psicóloga Emily Nagoski en su libro "Cómo quiere la mujer" (Mann, Ivanov y Ferber Publishing House).

¿Está el pozo vacío?

Un día, el cliente le preguntó a Emily Nagoski por qué el "pozo del deseo" se está vaciando. A esto el psicólogo respondió que no hay pozo. Mucho más para comparar una ducha. A veces tiene una fuerte presión y, a veces, una débil. En cualquier caso, lavarlo resultará, pero dependiendo de las condiciones será un pasatiempo agradable o el trabajo duro actual.

Entonces con la vida sexual. El contexto, la actitud psicológica y las circunstancias externas, afectan la capacidad de experimentar emoción y de disfrutar el proceso. Al mismo tiempo, cada uno de nosotros tiene su propio sistema de incentivos, que fortalecen y debilitan la "presión" del deseo. Por ejemplo, si una persona "comienza" solo en lugares concurridos, para otra, la misma situación puede ser un factor negativo.

Emily Nagoski más de 20 años ayuda a las mujeres a amarse a sí mismas y a su cuerpo

Factores emocionantes y desalentadores

Para mejorar la vida íntima, primero debes comprender qué es exactamente lo que te excita y te desalienta. Para hacer esto, haga dos listas. En la primera lista, todas las circunstancias que lo ayudan a experimentar el deseo y, en el otro, factores que le impiden sintonizar con el placer.

Aquí hay una pequeña cuna. Recuerda los momentos eróticos más exitosos en tu vida y escribe las respuestas a las preguntas:

"¿Cómo te pareces?"

- ¿Cómo te sentiste?

- ¿De qué humor eras?

- ¿Cuál era tu pareja (apariencia, olor, comportamiento, etc.)?

- ¿De qué manera fuiste? ¿Con qué frecuencia te conociste? ¿Tuviste una intimidad emocional?

- ¿Dónde y en qué entorno tuvo relaciones sexuales?

- ¿Recuerdas alguna circunstancia especial (por ejemplo, sucedió en vacaciones)?

- ¿Qué tipo de acciones hicieron usted y su pareja?

Y ahora piense en la experiencia sexual más desagradable y describa los detalles usando la misma pista.

Baño grande, creciente impaciencia y calcetines calientes

Entre los incentivos positivos puede haber cualquier cosa. Por ejemplo, alguien excita la ternura y una actitud especial de un compañero. Para uno de los clientes de Emily Nagoski, la señal erótica más impresionante fueron los grandes baños en los hoteles. Cuando la niña se dio cuenta de esto, inmediatamente comenzó una reparación de la casa.

Otra mujer descubrió que obtiene el mayor placer de la intimidad, cuando la pareja la "maneja" gradualmente durante el día con la ayuda de insinuaciones y coqueteos. Ella habló con su esposo, y sus relaciones sexuales fueron normales. En general, ahora sabes cómo actuar.

Sin embargo, no olvide que algunos factores dificultan la diversión. Incluso si te rodeas de señales eróticas positivas, las circunstancias desalentadoras pueden echar a perder todo. A veces es bastante fácil eliminarlos. Por ejemplo, durante un estudio, los hombres no pudieron alcanzar el orgasmo hasta que se les permitió usar calcetines. Resulta que los sujetos simplemente se congelaron.

Si tienes demasiado frío, toma una manta. ¿Torturar? Encienda el aire acondicionado. Vecinos ruidosos distraídos? Espere un momento tranquilo o busque otro lugar. Pero estas son solo circunstancias externas. Mucho más importante es lo que sucede en tu cabeza. Con esto y trata de entender ahora.

Estrés

Cualquier estrés es percibido por el cerebro humano como una amenaza inmediata a la vida. La pesada carga de trabajo en el trabajo, los conflictos con colegas, el jefe tirano, para su sistema nervioso son todos iguales al león hambriento que cabalga hacia usted. Por supuesto, bajo tales condiciones, no tienes sexo en absoluto.

Según los psicólogos, no es suficiente resolver el problema que causó estrés. Todavía es necesario darle al cerebro una señal de que todo está en orden. Para esto, puedes hacer deporte, meditar, dormir bien, ir a un masaje o simplemente llorar y gritar para deshacerte de las emociones negativas acumuladas.

Autocrítica

Las encuestas realizadas entre mujeres mostraron que aquellos que están insatisfechos con su propio cuerpo y son propensos a los ataques de auto-abatimiento son mucho más difíciles de experimentar el placer del sexo. Y no es sorprendente. Es difícil regocijarse en la intimidad, si en el proceso te preocupa constantemente si tus senos están eróticamente rebotando eróticamente y si la pareja notó un exceso de arrugas en el estómago.

Aprende a amar a tu cuerpo tal como es. Considérelo regularmente en el espejo y tenga en cuenta todas las dignidades. Fuerce la crítica interna para permanecer en silencio. Por cierto, esto se aplica no solo al exterior. No tienes que soportar infinitamente debido a tus fallas y errores. Esta forma de pensar solo puede llevar a la depresión. En cambio, trata de tratarte con amabilidad y compasión.

Desconfianza de un compañero

Otro factor que afecta significativamente nuestra capacidad de experimentar el deseo sexual es la confianza en el elegido.

En muchos casos, la desconfianza es difícil de justificar. Se puede asociar con una experiencia previa sin éxito. Por ejemplo, si los padres no le han prestado suficiente atención o si ya ha experimentado un descanso desagradable, es muy probable que tenga miedo a otra decepción.

Y que al final? O comenzará a atormentar a su pareja con celos y obsesión excesiva, o, por el contrario, se mantendrá demasiado distante y fría. Por supuesto, las relaciones con él no serán mejores.

Intenta entender tus sentimientos con calma. No culpes ni a ti ni a tu compañero. Solo admite que te tienen. Piensa en cómo puedes lidiar con ellos. Algunas veces la meditación consciente ayuda, una vez que solo necesitas llorar, y algunas veces el mejor medio es compartir tus pensamientos con tu amante. Solo tú puedes encontrar un método adecuado.

Más sobre cómo trabajar con los factores internos y externos que afectan nuestra vida sexual: en el libro "Cómo desea una mujer".