Terapia etiotropica

La terapia etiotrópica es un tratamiento, el objetivo principal de la puñalada es eliminar o debilitar la causa subyacente de la enfermedad. Para esto, se usan varios medicamentos. Entonces, los medicamentos de la terapia etiotrópica pueden ser antibióticos y antídotos y sulfonamidas, sueros hiperinmunes y probióticos , y muchas otras drogas.

Terapia etiotrópica de enfermedades infecciosas

Este método consiste en tomar antibióticos, sulfanilamida, antiprotozoarios o medicamentos antivirales. Esto puede ser tanto un amplio espectro de acción como medicamentos específicos. Los principios básicos de la terapia etiotrópica en caso de una enfermedad infecciosa:

Al observar estas reglas, puede eliminar del cuerpo no solo el patógeno, sino también los productos de su actividad vital, lo que contribuye a una recuperación rápida.

En algunos casos, la identificación se lleva a cabo, pero el tratamiento comienza antes de que se obtengan los resultados. Así que la terapia etiotrópica de la neumonía primero se centra en las características del cuadro clínico o los datos de la radiografía, ya que la demora puede causar complicaciones.

Terapia etiotrópica para la cistitis aguda

Muy a menudo, los métodos de terapia etiotrópica se usan en una enfermedad infecciosa-inflamatoria como la cistitis. En este caso, el tratamiento debe ser individual y complejo. Pero antes que nada debe estar dirigido a la sanación del foco de infección. Es por eso que la terapia etiotrópica para la cistitis aguda es un método de remedios bacterianos y aquellos medicamentos que eliminarían el síndrome del dolor. Los medicamentos de elección para esta enfermedad serán uroantisépticos. Esto, por ejemplo:

También se usan antiespasmódicos y analgésicos. También pueden tener un efecto antiinflamatorio:

Si un paciente tiene cistitis hemorrágica aguda, la terapia etiotrópica debe incluir el uso de hemostáticos para detener rápidamente el sangrado.

Prescribir un antibiótico específico u otro tipo de medicamento solo es permisible después de que el paciente haya orinado. Solo la siembra de orina ayudará a establecer el agente causal de la cistitis, lo que permitirá utilizar el antibiótico más dañino para este microorganismo patógeno.