La frecuencia de palpitaciones en el feto es el indicador más importante, que indica el correcto desarrollo del niño en el útero y su viabilidad. Estos datos son de interés para ginecólogos y parteras durante todo el embarazo, pero en el proceso de parto, especialmente.
¿Cómo late el corazón del feto?
Hay varias maneras de determinar la frecuencia cardíaca en un embrión:
- Examen de ultrasonido, que se puede realizar de forma transvaginal en la sexta o séptima semana de gestación: la frecuencia cardíaca fetal durante este período es de aproximadamente 100-130 latidos por minuto;
- La auscultación es el método más común que usan todos los obstetras: con la ayuda de un estetoscopio conectado al vientre embarazado, el médico escucha los ritmos cardíacos del niño;
- ECHO KG del corazón del feto: este método solo es relevante de 18 a 28 semanas de gestación y se prescribe solo si hay riesgos de malformación del bebé;
- también es posible usar una cardiotocografía, un dispositivo para escuchar los latidos del corazón del feto y la madre al mismo tiempo: la cardiotocografía es necesaria para establecer la respuesta del niño a la actividad contráctil del útero y para evaluar el grado de preparación para el parto.
Patologías del músculo cardíaco fetal
Un diagnóstico bastante frecuente, determinado por ultrasonido, fue un enfoque hiperecoico en el corazón del feto. Este término indica que una cierta área del corazón del bebé, donde se encuentran la mayoría de los depósitos de sales de calcio, tiene un aumento de la ecogenicidad. La inclusión hiperecoica en el corazón del feto no es una mancha, y con mucha frecuencia desaparece al nacer.
El defecto cardíaco en el feto, o más bien los cambios anatómicos en la estructura del músculo cardíaco, se puede determinar ya en la semana 14-15 de gestación. Los médicos asignan alrededor de 100 variedades de dicha anomalía, algunas de las cuales se curan con éxito mediante métodos médicos o quirúrgicos. Por lo tanto, no tome una decisión inmediata
La arritmia del corazón en el feto tampoco tiene ningún peligro particular, ya que no es un signo agudo de la presencia de la patología del músculo cardíaco del niño.
Es necesario comprender que el estudio de los latidos cardíacos del embrión permite evaluar objetivamente el estado general del niño, corregir los posibles defectos de su desarrollo a tiempo y elegir las tácticas correctas durante su nacimiento. La frecuencia cardíaca en los niños que están en el útero de la madre se establece en 140-160 cortes por minuto y se mantiene sin cambios hasta el mismo nacimiento.