El gran mártir Panteleimon es uno de los sanadores más fuertes entre todos los santos. Es a él a quien cientos de cristianos que sufren hacen sus pedidos. La oración de Panteleimon por la salud a menudo tiene un efecto verdaderamente milagroso y ayuda incluso en los casos en que ya parecía que no había esperanza. Como dice la Biblia, todos serán recompensados de acuerdo con su fe. Y si crees con todo tu corazón, entonces la oración se vuelve milagrosa.
Una breve oración a Panteleimon
El Elegido es más apasionado que Cristo y el amable doctor, sintonice a aquellos que no curan la curación, cante alabanzas a usted, nuestro protector. Tú, que tienes audacia para con el Señor, de todos los problemas y enfermedades, líbranos, amando tu llamado. Alégrate, gran mártir y sanador Panteleimon. Amén.
Oración por la recuperación del paciente Panteleimon
Vladyka, el Todopoderoso, el Rey Sagrado, castiga y no mata, confirma la caída y erigir de los oprimidos, la gente corpórea de la pena es correcta, te rogamos, Nuestro Dios, Tu siervo (nombre), impotente para visitar Tu misericordia, perdónalo libre de pecado e involuntario. A ella, oh Señor, baja tu poder sanador del cielo, toca teleseidad, apaga el fuego, domina la pasión y toda la debilidad que se esconde. Despierta al doctor de Tu siervo (nombre), levántalo del lecho enfermizo y del lecho de amargura completo y perfecto, concédele Tu iglesia auspiciosa y haz tu voluntad Tuyo es, que seas bueno y sálvanos, nuestro Dios, y para Ti enviamos gloria, al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, ahora y siempre, y por los siglos de los siglos. Amén.
Oración de San Panteleimon sobre la curación
A usted, como médico libre, consolador de dolientes, enriquecimiento de los necesitados, ahora recurrimos, Saint Panteleimon. Siendo sabio para el mundo y el arte de la medicina, habiendo aprendido bien, has creído en Cristo, y de Él el don de sanidades, que fueron sin malicia, los sanó. Dimos a todos nuestros pobres, inútiles mendigos, huérfanos y viudas, en las ataduras de los atormentados, visitamos al santo sufriente de Cristo, y él los consoló con curación, conversación y limosnas. Por la fe en Cristo, los múltiples torturados, fuiste cortado a la cabeza de la espada, y antes de tu muerte, cuando Cristo apareció, te nombró Panteleimon,