Niños sobre el gran mensaje

En nuestro tiempo, cuando casi cualquier información es accesible para los niños debido a la amplia distribución de los medios e Internet, es extremadamente importante inculcar en los valores espirituales del niño. Esto lo ayudará a evitar muchos errores y priorizar correctamente su vida en el futuro. Dado que la mayoría de los padres bautizan a sus hijos en la tradición ortodoxa, en una forma accesible para contarles a los niños acerca del Gran Mensaje antes de la Pascua, es simplemente necesario.

¿Qué tan interesante es enviar información sobre un canon religioso a un niño pequeño?

A algunas madres y padres les parece que no vale la pena hablar sobre la Cuaresma para los niños: no entenderán nada. Pero esto no es así: es fascinante y con el alma la información presentada acerca de esta tradición cristiana será despedida en la cabeza del niño y luego dará sus frutos. Para comenzar el conocimiento de la Gran Cuaresma es el siguiente:

  1. Lo mejor es que un pariente cercano le cuente la historia a los niños sobre el Gran Correo: madre, padre, abuela, es decir, una persona en quien el niño confía. Explíquele que, según las creencias cristianas, una persona combina material y espiritual. Pero a causa del pecado original de Adán y Eva (es apropiado recordar la historia del Edén y la creación de Dios por las primeras personas) a menudo prevalece el material. Por lo tanto, para superar el llamado de la carne y limpiar sus pensamientos, se estableció un ayuno.
  2. Después de contarles a los niños acerca del Gran Mensaje, asegúrese de visitar los servicios, pero no obligue al bebé a permanecer en la iglesia más de lo que él es capaz por edad. Acérquese al templo con toda la familia y ore fervientemente: seguramente el niño recordará este día especial durante mucho tiempo.
  3. No obligue a los niños a orar o recibir la comunión: solo díganme por qué lo necesitan y cómo les gustaría que su hijo o hija se acerque más a nuestro Señor. Los niños son muy receptivos y sin duda responderán a un llamado tan delicado para respetar las tradiciones.
  4. En una conversación sobre el Gran Mensaje con niños, asegúrese de mencionar las restricciones en los alimentos (no puede comer carne, productos lácteos, etc.), pero recuerde que antes de los 12 años de edad, restringir a un niño a alimentos de origen animal no debe ser médicamente indicado. Pregúntele al niño por qué está dispuesto a negarse, para mostrarle su amor y profunda veneración por Cristo, y es probable que él mismo acepte gustosamente no tocar el pastel y el chocolate habituales.
  5. Al reunirse para contarles sobre el Gran Ayuno a los niños, piense en cómo puede compensar la abnegación del joven cristiano si acepta negarse por este período a ver televisión o una computadora. Tal vez leerá, dibujará o verá muchas películas, de las que puede aportar mucha información útil e instructiva.