¿Qué le dan las rosas amarillas?

Las rosas destacan de todos los colores con su lujo y elegancia. Las manzanillas son demasiado simples, los tulipanes son un poco "ingenuos", los lirios son pretenciosos, pero las rosas son el medio dorado. Estas hermosas flores han desempeñado durante muchos años un papel importante en la expresión de emociones entre amigos y amantes. Las rosas contribuyeron al desarrollo del lenguaje de las flores, que ahora es popular. Este lenguaje tiene en cuenta varios factores: los tipos de brotes, el número de colores. Entonces, por ejemplo, una rosa presentada en un compartimento con una rosa blanca sin revelar significa lo siguiente: "Te amo, pero eres muy joven".

El significado simbólico de la rosa tiene sus raíces históricas. En la época victoriana, el significado del número de flores se asociaba con el patrimonio religioso: los números bíblicos siete, tres, nueve. Desde entonces, se ha acostumbrado dar un número impar de rosas, ya que simboliza la felicidad, la suerte y el éxito. Si hay más de una docena de colores en el ramo, entonces su número ya no es importante.

Además del número de yemas, el color de la rosa es muy importante. Usando diferentes tonos puede expresar diferentes sentimientos, transmitir su estado de ánimo, o incluso insinuar algo. Entonces, las rosas pueden expresar pasión, gratitud, simpatía, respeto o disculparse por ti. Pero no siempre las rosas significan cosas positivas. Existe la creencia de que no se pueden dar rosas amarillas, ya que tienen un carácter negativo y provocan disputas. Para entender qué es lo que le da rosas amarillas y si pueden traerle la desgracia, necesita analizar, cuestionar e identificar todos los pros y los contras.

¿Qué significan las rosas amarillas?

¿De dónde sacó la gente la creencia sobre las rosas amarillas? Lo más probable es que esto se deba al valor negativo del color amarillo. ¿Recuerdas dónde se encuentra este color con más frecuencia?

  1. Señal de tráfico Cuando se enciende la luz amarilla, significa "¡Cuidado!", "¡Cuidado!". Además, el color se usa en publicidad cuando quieren atraer la atención de los espectadores.
  2. Un signo de vergüenza, chismes, odio . Es posible observar expresiones modernas como "prensa amarilla", "casa amarilla". Tonos sucios de amarillo a la misma simbolizan la enfermedad y la locura.
  3. Color de la traición . Hay una leyenda que habla de un profeta que, antes de partir para la guerra, le quitó a su esposa la promesa de mantenerlo fiel. Al regresar, su marido dudó de su fidelidad y le pidió que pusiera una rosa roja en el agua, y si ella no cambia de color, entonces la mujer le fue fiel. Sin embargo, la flor se volvió amarilla.

Tal vez fueron estas leyendas y señales de advertencia las que alertaron a las personas y finalmente le dieron a la rosa amarilla el significado de traición , separación y sentimientos que están relacionados con ella. Se cree que si obtienes flores amarillas, entonces esta será una señal de advertencia sobre la separación más rápida, por lo que debes estar alerta. Para los hipocondríacos que creen en los signos, estas son razones suficientes por las que no debes dar rosas amarillas.

El valor positivo de las rosas amarillas

Junto con los valores negativos listados, también hay interpretaciones positivas, que, además, son mucho más grandes. ¿Qué asocias con el color amarillo? Hay varios valores estables:

Los psicólogos creen que el color amarillo es elegido por personas seguras, listas para experimentar y esforzarse por la independencia y el cambio. El rechazo del color amarillo indica ansiedad e infelicidad intrapersonal.

Si hablamos de rosas amarillas, simbolizarán la manifestación de cuidado, libertad y energía. Muy a menudo estas flores se presentan con fines de felicitación, para marcar el éxito de alguien y expresar admiración por los logros. Tales rosas pueden reconciliar una pelea, porque en el lenguaje de los colores indican: "Dejemos lo malo y

comenzaremos con una página limpia ". Por lo tanto, la respuesta a la pregunta: ¿es posible dar rosas amarillas ?, la respuesta es inequívoca: ¡es posible y necesario!