Las venas varicosas son una enfermedad que se encuentra con mayor frecuencia en mujeres mayores de 30 años y se asocia con una salida incorrecta de sangre venosa y cambios patológicos en las venas (disminución del tono y elasticidad de las paredes venosas, estiramiento y alargamiento de las venas, formación de nudos, etc.). El desarrollo de la enfermedad se produce bajo la influencia de varios factores, que progresa constantemente en ausencia de tratamiento adecuado y que a menudo causa complicaciones graves. Por lo tanto, es muy importante detectar las venas varicosas a tiempo y comenzar el tratamiento.
Los primeros síntomas de venas varicosas en mujeres
Los primeros síntomas de las venas varicosas en las piernas, especialmente en el interior, en el que la lesión cubre las venas profundas, pocos prestan atención. Cuando todavía no se visualizan los cambios en las venas, las sensaciones dolorosas de una naturaleza diferente pueden actuar como signos inquietantes de patología. El dolor en las piernas con venas varicosas es uno de los síntomas principales, y tiene algunas características especiales:
- el dolor se localiza a lo largo de las venas;
- ocurre más a menudo por la noche, después del ejercicio físico;
- el dolor a menudo tiene un carácter pulsante, ardiente y explosivo;
- el dolor disminuye cuando mueve los pies a una posición horizontal ligeramente elevada y regresa cuando vuelve a la posición vertical.
Otros signos comunes de varices en las piernas en mujeres, presentes ya al comienzo de la enfermedad, son:
- sensación de pesadez y aumento de la fatiga en las piernas;
- calambres nocturnos en los músculos de la pantorrilla ;
- hinchazón periódica de las piernas en la noche (generalmente en el área de los pies, los tobillos y la parte inferior de las piernas).
Signos de pierna varicosa con progresión de la enfermedad
En las siguientes etapas del desarrollo de la enfermedad, la sensibilidad, la pesadez y otras sensaciones incómodas en las extremidades inferiores se vuelven más pronunciadas, casi constantes. La hinchazón también aumenta, se vuelve más estable. Cambios patológicos visibles de venas superficiales:
- vasculatura pronunciada;
- asteriscos vasculares ;
- Venas engrosadas y engrosadas con deformidades en la bolsita.
También hay un cambio en la piel de las piernas, a saber:
- la piel se vuelve seca, espesa;
- hay hiperpigmentación de las piernas (puede estar precedida por la aparición de manchas rojas y azules en la piel);
- desarrollar dermatitis, eczema, úlceras.
El último de estos signos indica una etapa grave de la enfermedad, que requiere una acción urgente.