Apnea en recién nacidos

Con el advenimiento del niño, el sueño de la madre se vuelve tan sensible que la mayoría de las madres pueden escuchar ruidos y sonidos apenas audibles del bebé. A menudo, las madres escuchan a la noche "olfatear" para asegurarse de que la respiración del bebé no se vea alterada. Tales experiencias a veces no son en vano, porque algunos recién nacidos pueden tener un desorden peligroso, la apnea, que puede llevar a la suspensión de la respiración.

La apnea se caracteriza por el hecho de que en un sueño la respiración se interrumpe en los niños. Los bebés con mayor frecuencia tienen apnea central, durante la cual el cerebro deja de enviar señales a los músculos respiratorios, y su trabajo se detiene temporalmente. El mayor riesgo de desarrollar apnea es susceptible a los recién nacidos prematuros que nacieron antes de las 37 semanas de gestación.

Las causas de la apnea se atribuyen con mayor frecuencia a la inmadurez del sistema nervioso central. Pero la dolencia también puede desarrollarse debido a otras malformaciones, infecciones, enfermedades gastrointestinales (particularmente reflujo), problemas con la función cardíaca y vascular, desequilibrio de minerales y envenenamiento con medicamentos.

Síntomas de la apnea

Según los estudios de laboratorio, el paro respiratorio en los bebés dura, en promedio, 20 segundos, pero puede ser más prolongado, en niños mayores: no más de 10 segundos. Después de esto, el niño de repente llora o suspira, y se restablece la respiración. Debido a la falta de oxígeno, la piel de los brazos y las piernas del bebé adquiere un tono cianótico.

Según los pediatras, la respiración periódica puede ser la norma para los niños menores de 6 meses. En niños sanos, la respiración periódica con pausas de aproximadamente 10-15 segundos requiere un 5% del tiempo de sueño. Pero, como regla general, los niños que tienen apnea nocturna del sueño a menudo se colocan en un hospital para que los examinen y se aseguren de que la respiración no se detiene. La apnea es peligrosa para Los recién nacidos que reducen el nivel de oxígeno en la sangre reducen la frecuencia cardíaca. Esta condición se llama bradicardia.

Las madres, cuyos bebés sufren de apnea, deben saber qué se puede hacer cuando el bebé deja de respirar en un sueño. Lo primero que debe hacer es disminuir la velocidad del bebé: frótese los talones, las plumas y los lóbulos de las orejas. Para garantizar el flujo de sangre a la cabeza, debe girar al bebé hacia la barriga. Necesidad urgente de llamar a una ambulancia, si el tronco o la frente se vuelven cianóticos. El tratamiento de la apnea debe estar bajo la supervisión de un médico que pueda recetar medicamentos que estimulen el sistema nervioso central.