Aracnoiditis cerebral

Esta enfermedad es un proceso inflamatorio de la aracnoides del cerebro (cabeza o médula espinal). Hay una patología como resultado de complicaciones de las dolencias infecciosas transferidas. La aracnoiditis cerebral ocurre con inflamación y engrosamiento de la membrana del cerebro, lo que produce un dolor de cabeza constante, que es el principal signo de la enfermedad.

Síntomas de aracnoiditis cerebral

Como regla, el desarrollo de la enfermedad ocurre dentro de los cinco meses en pacientes que han estado enfermos con la gripe y han encontrado procesos infecciosos en el oído, senos paranasales o encefalitis. Observado durante un largo período de infección y la aparición de los síntomas iniciales de la enfermedad puede concluir que el desarrollo de la aracnoiditis cerebral del cerebro.

Las principales manifestaciones de la enfermedad incluyen:

Consecuencias de la aracnoiditis cerebral

La enfermedad es bastante peligrosa, porque muy rara vez pasa sin dejar rastro. En general, una persona se recupera. Si la salud no se recupera completamente, el paciente recibe un tercer grupo de discapacidad.

En caso de complicaciones con la hidrocefalia cerebral, puede ocurrir un resultado letal.

Además, en el 10% de los casos, una persona puede experimentar epilepsia, lo que lo obligará a tomar medicamentos especiales durante toda su vida.

Aproximadamente el 2% de los pacientes tienen visión reducida, a veces la capacidad de ver se pierde por completo.

Tratamiento de aracnoiditis cerebral

Todo el proceso de tratamiento debe llevarse a cabo en un hospital bajo la supervisión de un médico. En primer lugar, debe estar dirigido a combatir la infección que provocó la enfermedad. Para esto, al paciente se le recetan los siguientes medicamentos:

Para el tratamiento de las convulsiones puede recomendar el uso de anticonvulsivos. Además, se prescribe un tratamiento patogénico que proporciona una terapia a largo plazo con el uso de resorción y medicamentos que ayudan a normalizar la presión dentro del cráneo.

Si no se observa mejoría, se toma una decisión sobre la intervención quirúrgica, que se realiza necesariamente con aracnoiditis quística cerebral. Este procedimiento tiene como objetivo reducir la inflamación y eliminar la hipertensión intracraneal.