Aroma terapéutico es la magia en la bolsa

Los sobres aromáticos se usan con mayor frecuencia para cajas de ropa o armarios. Pero estas pequeñas bolsas pueden usarse para la terapia de todo tipo de enfermedades, eliminando el dolor de cabeza o simplemente para relajarse después de un día desagradable. Además, el sobre no tiene que comprarse en la tienda, es fácil hacerlo tú mismo.

Aromaterapia: ¿cómo funciona?

En la percepción de varios olores, el papel principal lo juega un área especial del cerebro con analizadores olfativos. En este caso, existen conexiones neuronales estables que transmiten los impulsos eléctricos correspondientes al sistema nervioso.

Por lo tanto, la terapia aromática realiza las siguientes funciones:

Además, los aceites esenciales utilizados para la producción de bolsitas aromáticas y hierbas secas presentan las siguientes propiedades:

Se deduce que la aromaterapia debe tomarse muy en serio y seleccionar combinaciones de olores adecuados.

¿De qué y cómo hacer una bolsa aromática?

Para hacer una bolsita, no se requieren habilidades de costura especiales, todo lo que necesita es un corte de tela natural (lino o algodón), una aguja con un hilo y un conjunto de hierbas con aceites esenciales. Para mantener el olor más largo, es mejor doblar el material por la mitad. Dentro de la bolsita es necesario poner una mezcla de hierbas secas recogidas solas o compradas en una tienda especializada. Las materias primas deben triturarse muy bien y colocarse en una bolsa lo antes posible para evitar la pérdida de sabor. Según el propósito, se usan las siguientes hierbas y fitogenos:

En la selección de fitoquímicos, además de las preferencias personales, uno debe guiarse por las propiedades terapéuticas de las plantas y los efectos proporcionados.

Para mejorar, tanto el aroma como las acciones terapéuticas, puede agregar el aceite esencial de la bolsita. Los tipos más populares de estos productos son:

Vale la pena señalar que las bolsas aromáticas fabricadas se pueden colocar en cualquier parte de la carcasa, a excepción de la cocina, por supuesto. Por ejemplo, un sobre con lavanda es bueno para un dormitorio, ya que tiene un efecto calmante, ayuda a normalizar el sueño.

Los aromasomas con propiedades antisépticas (árbol de té, eucalipto, pino) deberían ubicarse en aquellas salas donde haya una gran cantidad de personas para desinfectar el aire y evitar la propagación de bacterias. Los sobres antiinflamatorios (cilantro, bergamota, menta) son ideales cuando alguien de personas cercanas ha sufrido una infección viral respiratoria o gripe.