El Palacio de Agua


Buenos Aires : este es un verdadero cofre del tesoro, en cuyo papel se encuentran los monumentos más diversos de la arquitectura. Aquí, nadie se aburrirá, e incluso durante una caminata ordinaria por el centro se pueden ver varias casas y estructuras ornamentadas. Un ejemplo vívido es el Palacio de Aguas Corrientes.

¿Qué tiene de interesante el Palacio del Agua en Buenos Aires?

En la segunda mitad del siglo XIX, en la superpoblada Buenos Aires, se necesitaba una fuente adicional de agua, cuya ausencia se manifestaba en la ciudad por epidemias de tifus, cólera o fiebre amarilla. Dado que en ese momento la ciudad se consideraba bastante progresiva, el problema encontró su solución en la construcción del mismo Palacio de Agua, que de hecho es un enlace funcional en el sistema de suministro de agua de la capital. Aunque este edificio se encuentra un poco alejado de las rutas turísticas habituales, vale la pena admirarlo.

El palacio de agua fue erigido en 1894 y todavía es considerado uno de los edificios más lujosos de Buenos Aires. Su arquitectura se sustenta en el estilo de un carácter imperial ecléctico. En la decoración exterior del palacio se necesita mucho dinero y tiempo, pero ahora la fachada del edificio atrae la mirada de los transeúntes. Especialmente para la construcción del Palacio de Agua de Bélgica importó alrededor de 130 mil ladrillos vidriados y 300 mil azulejos de cerámica. Curiosamente, incluso fueron numerados para facilitar el montaje. Los elementos de decoración que podemos ver en la fachada del edificio están diseñados en Londres, y los materiales de acabado para el techo provienen de Francia.

Dentro de este magnífico esplendor están instalados 12 tanques con un volumen total de 72 millones de litros de agua. El acabado costoso causó muchas críticas entre la población local, pero en ese momento era una práctica bastante común cuando los nodos funcionales parecían colocarse en un envoltorio brillante y colorido en la forma de un palacio o mansión.

Hoy, el Palacio del Agua sigue siendo una conexión de agua. Además, hay varias oficinas y el Museo del Agua. Sus exhibiciones le dicen a los visitantes no solo sobre la construcción de este edificio, sino también sobre aquellos tiempos difíciles en los que la gente, en ausencia de buen agua para beber, sufría de enfermedades terribles como el tifus o el cólera.

¿Cómo llegar al Palacio de Aguas de Buenos Aires?

El edificio está ubicado en una zona concurrida con una buena intersección de tráfico, por lo que es fácil llegar allí. En las inmediaciones hay una estación de metro de Callao, así como la parada de autobús Viamonte 1902-1982, por la que pasan las rutas Nos 29A, 29V, 29S, 75A, 75V, 99A, 109A, 140C.