Escleroplastia del ojo

La escleroplastia se realiza en los ojos para fortalecer la esclerótica del globo ocular (la capa externa del ojo). La escleroplastia se considera no solo médica, sino también cirugía estética. Detiene el aumento en el tamaño del globo ocular, que aparece debido a la miopía, es decir, la miopía.

Indicaciones para escleroplastia

Hoy la miopía es una de las enfermedades oftálmicas más comunes. La miopía es la causa de la discapacidad visual en el 44% de los pacientes. La miopía puede provocar las siguientes complicaciones:

Tales complicaciones pueden causar globos oculares. Esto es lo que causa la operación de fortalecimiento de la esclerótica.

La escleroplastia del ojo es uno de los principales métodos de tratamiento del desarrollo de la miopía, así como la prevención de la miopía y las distrofias coriorretinianas. Desafortunadamente, esta operación oftálmica puede detener la progresión de la enfermedad ocular, pero no puede mejorar la vista. Por lo tanto, es necesario hacerlo a personas con miopía progresiva, cuando la miopía aumenta más de un diopril por año.

Contraindicaciones para la escleroplastia

El funcionamiento de la escleroplastia, al igual que otros hechos de intervención médica, tiene contraindicaciones, que su médico debe tener en cuenta. Hay varios de ellos:

Tampoco se recomienda realizar cirugía para niños menores de ocho años.

¿Cómo es la escleroplastia de los ojos?

Como todas las operaciones oculares en el ojo, la escleroplastia es una operación muy complicada. Durante este, los médicos inyectan un tejido escleroplástico especial en la parte posterior del ojo. Esto se hace a través de pequeños cortes. Además, las tiras insertadas están soldadas a la esclerótica, fortaleciendo así la pared posterior del ojo. Esto ayuda a mejorar el suministro de sangre al globo ocular y prevenir su crecimiento. Cuál es la tarea principal de la operación.

Complicaciones después de la escleroplastia

Desafortunadamente, la escleropalcología antes de los ojos puede tener consecuencias negativas. Pueden consistir en la manifestación de una alergia al tejido escleroplástico, por lo que la calidad de los materiales es muy importante. Además, el sesgo directo del tejido escleroplástico es permisible, como resultado de lo cual aparece como una pequeña hinchazón debajo de la conjuntiva. A altas cargas visuales después de la operación, puede aparecer estrabismo y efecto astigmático.