Inflamación del tendón de Aquiles

Tendón de Aquiles : el tendón más duradero, potente y grueso del cuerpo humano. Por medio de ella, los músculos posteriores de la pierna (pantorrilla y sóleo) se unen, conectando con el talón del calcáneo. Con la contracción muscular, el tendón se estira y, debido a esto, es posible la flexión plantar en la articulación del tobillo. El tendón de Aquiles se encuentra en un canal especial que contiene líquido. Esto, así como el hecho de que el saco mucocutáneo se encuentra entre el calcáneo y el tendón, ayuda a reducir la fricción entre el tendón y el hueso.

Causas de la inflamación del tendón de Aquiles

A pesar de lo anterior, el tendón de Aquiles es muy vulnerable y su daño es bastante común. Los procesos patológicos en los tejidos de los tendones generalmente no ocurren repentinamente, sino que se desarrollan durante un período de tiempo bastante largo. Todo comienza con una inflamación del tendón de Aquiles, que con frecuencia se asocia con un estrés intenso y frecuente en los músculos de las espinillas, con zapatos incómodos. Además, la inflamación puede desarrollarse debido a trastornos metabólicos o procesos infecciosos. Este diagnóstico a menudo se aplica a los bailarines, atletas.

Síntomas de inflamación del tendón de Aquiles

La inflamación de los tejidos del tendón de Aquiles a menudo también afecta la bolsa mucosa. Los signos de inflamación son:

Tratamiento de la inflamación del tendón de Aquiles

Si no comienza el tratamiento a tiempo, el proceso patológico puede llevar a micro-fracturas, grietas y una ruptura completa del tendón, la formación del espolón calcáneo y otras consecuencias. El tratamiento de la tendinitis de Aquiles incluye lo siguiente:

El uso de remedios caseros en el tratamiento de la inflamación del tendón de Aquiles es posible, pero después de un acuerdo con el médico. Aquí está la receta de uno de los remedios caseros eficaces:

Ingredientes:

Preparación

Diluya la arcilla con agua tibia hasta la consistencia de la crema agria espesa, agregue el vinagre. Moje la gasa en la mezcla resultante y aplique una compresa en el área afectada. Asegúrelo con un pañuelo, déjelo durante una hora y media. Realice el procedimiento todos los días durante una semana.