Jeringa de margaritas con erosión

Las duchas vaginales son uno de los métodos de higiene más populares entre las mujeres, y los ginecólogos a veces lo recomiendan como un método auxiliar para tratar ciertas enfermedades (erosión cervical, aftas, cistitis, etc.). Pero al mismo tiempo, el uso de jeringas no es tan inofensivo, como puede parecer a primera vista, y tiene una serie de contraindicaciones.

Veamos si es posible lavarse con la erosión y qué es exactamente.

Ducha vaginal con erosión del cuello uterino

El tratamiento de la erosión debe ser necesariamente controlado por un médico calificado, un especialista en su campo. Si la erosión es grande, se elimina mediante uno de los métodos modernos ( criodestrucción , diatermocoagulación , láser, química o coagulación de ondas de radio). Si la erosión es pequeña, por lo general se trata con métodos menos radicales (tabletas, supositorios). El procedimiento de ducha vaginal es un método extremadamente suave para curar la erosión, eliminar la inflamación o recuperarse de la cauterización. Pero en cualquier caso, será más correcto antes de inyectar para consultar en esta cuenta con su médico tratante.

Cuando se erosiona, la jeringa a menudo se practica con una decocción de manzanilla. Debe estar preparado de esta manera:

¿Cómo hacer jeringas correctamente durante la erosión?

Hay 3 maneras de ducharse: cada mujer elige la más cómoda para ella.

  1. La ducha vaginal usando la taza de Esmarch es una forma difícil de aplicarla en casa. Se gasta básicamente en un hospital.
  2. El procedimiento se realiza en posición supina con una jeringa. Esto es más conveniente para hacer en el baño. Acuéstese en el fondo de la bañera y arroje las piernas sobre los bordes. Acuéstese por un momento, relájese, y luego inserte la punta de la pera en la vagina y vierta el caldo. Haga esto lenta, lentamente; de ​​lo contrario, una fuerte corriente de agua puede ingresar al canal cervical, y esto no debe permitirse.
  3. También puede hacer jeringuillas, acostarse en la cama, colocar un barco médico debajo de él.
  4. La ducha vaginal en la posición de pie se hace así: levantarse por encima del inodoro, inclinando levemente el cuerpo hacia adelante y las piernas dobladas en las rodillas. Inserte la punta de la jeringa con mucho cuidado para no dañar la vejiga.

La ducha vaginal debe llevarse a cabo como un curso de tratamiento (no más de 2 semanas seguidas), ya que este procedimiento no es fisiológico y puede afectar la microflora natural de la vagina. Además, es imposible ducharse durante el embarazo, especialmente en sus etapas iniciales.