Hace algunas décadas, las lentes rígidas solo estaban hechas de polimetilmetacrilato o vidrio. No echaban de menos el oxígeno y eran muy incómodos de usar, ya que tenían que hervirse periódicamente y tratarse con limpiadores especiales. Hoy, las lentes de contacto duras están hechas de materiales producidos a base de silicona. Tienen una permeabilidad a los gases bastante alta y tienen muchas cualidades positivas.
Ventajas de lentes duros
Las lentes de contacto rígidas para la corrección de la visión tienen tales ventajas:
- Durabilidad : dado que el material del que están hechas es denso, mantienen perfectamente la forma.
- Estabilidad de la imagen : estos productos no se deforman al parpadear, por lo que la imagen siempre es clara.
- Resistente a los depósitos de proteínas : son resistentes a las sustancias que llegan a su superficie por el fluido lagrimal, por lo que el período de uso seguro y cómodo de las lentes aumenta significativamente.
- Un diámetro pequeño : esto hace que la zona periférica exterior de la córnea esté más abierta para el acceso de oxígeno y una rotura que elimine las células muertas y las partículas extrañas.
- Durabilidad : la vida útil de las lentes duras de la noche y del día está limitada solo por los cambios en la visión del usuario.
Además, esta óptica correctiva no contiene agua. No se secan con el viento o en climas cálidos, lo que te permite no usar gotas hidratantes.
¿Cuándo es mejor usar lentes duros?
En algunos casos, lentes duros,
- corrección ortoqueratológica;
- astigmatismo pronunciado (si no se puede lograr la corrección necesaria con lentes suaves);
- edad-miopía;
- queratocono (enfermedad de la córnea, en la cual está agotada o deformada).