Neumonía en el embarazo

La neumonía a menudo tiene un carácter estacional y la incidencia es más frecuente en los períodos fríos del año. Pero las futuras madres, desafortunadamente, no siempre pueden estar protegidas de esta enfermedad.

La neumonía durante el embarazo conlleva una amenaza tanto para la salud de la madre como para la del feto y es una razón para la hospitalización y el tratamiento calificado. La neumonía durante el embarazo aumenta el riesgo de aborto espontáneo, especialmente si la enfermedad es febril.

Causas de neumonía en mujeres embarazadas

Los agentes causantes de la enfermedad son varias infecciones, dependiendo de si la enfermedad ha surgido en un entorno doméstico o se basa en el hospital. Los factores predisponentes son alcoholismo, tabaquismo, lesiones bronquiales obstructivas, insuficiencia cardíaca, tratamiento con inmunosupresores, ecología adversa, agotamiento del cuerpo.

La mayoría de los casos de neumonía son causados ​​por microorganismos que no tienen un efecto patológico en el feto (a excepción de los virus).

Síntomas de neumonía en mujeres embarazadas

Los principales signos de neumonía en el embarazo incluyen tos, dolor en el pecho, fiebre, disnea, escalofríos, intoxicación general: dolor de cabeza, debilidad, fatiga, sudoración, disminución del apetito.

La neumonía durante el embarazo es más grave, que se asocia con una disminución en la superficie respiratoria de los pulmones durante este período, una posición de diafragma alto, agrandada y elevada por el útero. Todo esto limita la respiración, provoca un aumento en la carga del sistema cardiovascular.

El tratamiento de la neumonía en mujeres embarazadas

El tratamiento de la neumonía en el embarazo es recomendable para llevar a cabo en un hospital. Al mismo tiempo, se nombran antibióticos, que no tienen un efecto perjudicial sobre el desarrollo del niño. Además, se pueden recomendar expectorantes, inhaladores, mostazas.

La neumonía proporcionó el tratamiento oportuno y correcto no es una indicación para la interrupción del embarazo. Sin embargo, en ciertos En algunos casos (como la neumonía en las primeras etapas del embarazo, teniendo lugar en el contexto de la gripe y en forma grave), el médico puede recomendar la interrupción del embarazo, ya que existe el riesgo de complicaciones perinatales o aborto espontáneo.

No menos peligrosa es la neumonía en una mujer embarazada, que comenzó poco antes del inicio del parto. En este caso, la amenaza es edema pulmonar, circulación difícil en ellos, insuficiencia de la actividad cardíaca de una mujer. En tales casos, los médicos intentan retrasar el inicio del trabajo de parto hasta que el pico de la enfermedad ha pasado, ya que el proceso de nacimiento durante la neumonía se vuelve peligroso para la mujer misma.