La poliartritis reumatoide es una enfermedad sistémica grave que causa la inflamación simultánea de varias articulaciones, acompañada de destrucción del cartílago articular y del tejido óseo. Con mucha frecuencia, esta enfermedad afecta las articulaciones de las manos y los pies, pero puede afectar a las articulaciones grandes, así como a otros sistemas y órganos.
Causas de la poliartritis reumatoide
El desarrollo del proceso inflamatorio y otros cambios patológicos en esta enfermedad están asociados con la reacción del sistema inmune, que se reconstruye bajo la influencia de algunos factores provocadores:
- superenfriamiento;
- reacciones alérgicas y tóxicas;
- estrés;
- trastornos metabólicos.
Sin embargo, se desconoce la naturaleza exacta del origen de la patología. La reacción resultante del sistema inmune se acompaña de la formación de inmunoglobulinas agregadas, que comienzan a atacar el cartílago articular y los tejidos adyacentes, provocando posteriormente cambios irreversibles.
Síntomas de la poliartritis reumatoide
Los primeros síntomas de la enfermedad, como regla, son insignificantes:
- aumento de la sensibilidad de las articulaciones a los cambios climáticos;
- rigidez matutina de las articulaciones;
- dolor leve en las articulaciones;
- ligera hinchazón de las articulaciones;
- disminución del apetito y el peso.
En el futuro, hay signos como un aumento en la temperatura corporal, debilidad general, sudoración excesiva, dolor muscular. Varias patologías de los órganos internos pueden surgir.
La progresión de la poliartritis reumatoide conduce a una notable deformación de las articulaciones, limitación de su movilidad, atrofia de los tejidos musculares circundantes. Una manifestación característica de la artritis reumatoide es la deformidad de las articulaciones en forma de "aleta de morsa" o "cuello de cisne". La poliartritis reumatoide de las piernas conduce a deformidades y desviación en la dirección de los dedos del pie, el desarrollo de los pies planos .
Diagnóstico de poliartritis reumatoide
Al diagnosticar un examen completo del cuerpo. Los siguientes estudios de laboratorio e instrumentales son indicativos:
- prueba de sangre bioquímica ;
- examen serológico de suero sanguíneo, nódulos y fluido intraarticular;
- Ultrasonido de las articulaciones y los órganos de la cavidad abdominal;
- Diagnóstico de rayos X y resonancia magnética de las articulaciones y la columna vertebral.
Cómo tratar la poliartritis reumatoidea?
El tratamiento moderno de la poliartritis reumatoide, como una enfermedad sistémica, se basa en un enfoque integrado, que incluye tales indicaciones:
- detener el proceso de destrucción y deformación de las articulaciones;
- eliminación del proceso inflamatorio;
- mejora del suministro de sangre y nutrición de los tejidos articulares;
- anestesia;
- aumento de la inmunidad local;
- estimulación de los procesos de regeneración de los tejidos de la articulación.
Se lleva a cabo farmacoterapia y tratamiento de fisioterapia. Se pueden prescribir sesiones de acupuntura, farmacoterapia, electroforesis, terapia con láser, terapia de ondas de choque, magnetoterapia, masajes y gimnasia terapéutica. El tratamiento medicamentoso de la poliartritis reumatoide incluye el uso de los siguientes medicamentos:
- corticosteroides;
- fármacos antiinflamatorios no esteroideos;
- drogas antirreumáticas;
- analgésicos.
El tratamiento puede realizarse en entornos ambulatorios o de pacientes hospitalizados. Si las medidas conservadoras no mejoran,
Nutrición para la poliartritis reumatoide
Para el tratamiento exitoso de la poliartritis reumatoide, es importante seguir una dieta cuyos principios básicos son:
- limitar el uso de sal;
- rechazo de platos y dulces refinados, ahumados y marinados;
- cumplimiento con el régimen de bebida: al menos 2 litros de líquido por día;
- consumo de una gran cantidad de vegetales y frutas.