Aglaonema "Maria"

Uno de los parientes cercanos de la diffenbachia es Aglaonema. Incluso se confunden a veces entre ellos. Su género consiste en aproximadamente 50 especies, una de las más populares de las cuales es cambiante. En este artículo conocerás una de sus variedades: Aglaonoma Maria.

Las características de Maria's Aglaoneme

Esta planta de hoja perenne es una magnífica altura de arbusto de 30-50 cm con hojas elipsoidales de color verde oscuro, a lo largo de las cuales hay manchas plateadas. En ese momento, las inclusiones de luz en la lámina de la hoja son ligeramente menores que en otras variedades de esta especie.

Esta flor es perfectamente adecuada para el crecimiento en las condiciones de la habitación, ya que debido a la gran cantidad de hojas y su rico color, puede ser indolora durante mucho tiempo bajo iluminación artificial e incluso a la sombra.

Blossom Aglaonema Maria en julio-agosto. Primero hay una inflorescencia de varias mazorcas envueltas en un velo verde claro, y luego se forman frutas de color rojo anaranjado.

En el grupo varietal de Maria's Aglaonemia también se incluyen las variedades "María Cristina", que crece un poco más alta que la habitual (hasta 70 cm), y "Maria Anna" con hojas más pequeñas.

Para no involucrarse en la reanimación de una planta enferma y debilitada, debe saber cómo cuidar a Aglaonema Maria.

Aglaonema Maria - cuidado en casa

En primer lugar, preste atención a:

  1. Ubicación. Esta flor se coloca mejor en las ventanas norte, oeste u oriental, ya que reacciona mal a la luz solar directa. Debemos asegurarnos de que no haya borradores en este lugar.
  2. Riego y alimentación En verano, se necesita mucha irrigación y se aplica fertilizante cada 2 semanas; en la estación fría, es mejor regar a través de la bandeja para que no haya anegamiento.
  3. Trasplante El trasplante en un recipiente más grande solo se debe hacer si es necesario, los adultos deben recibir este procedimiento no más de 3 años después.

De las enfermedades más a menudo aparece la pudrición de la raíz, que se puede identificar por el color amarillento de las hojas, y de las plagas: el ácaro rojo y araña, el piojo harinoso, los trips. Si se encuentra en una flor, tendrá que ser procesada, y en algunos casos incluso para cambiar el suelo.