Cólico biliar - síntomas

El cólico biliar es uno de los síntomas más obvios de cálculos biliares . El síndrome de dolor con cólico biliar se puede definir como muy inestable, ya que en cada caso es individual y difiere en la duración de los ataques de dolor y los intervalos entre ellos. Por lo tanto, en algunos pacientes ocurre cada varias horas y dura de dos a tres minutos a 4-7 horas, mientras que en otros dura hasta dos días, deteniéndose periódicamente y reanudándose rápidamente.

¿Qué precede al síndrome de dolor?

En muchos pacientes, un ataque doloroso es precedido por una sensación de pesadez debajo de la costilla derecha o en la región epigástrica. Si dentro de una o dos horas siente molestias y dolor en estas áreas anatómicas, debe tener miedo a un ataque agudo de dolor causado por cólico biliar.

Pero a algunos pacientes no les molestan las señales de advertencia, y el síndrome del dolor se manifiesta de repente, lo que no permite que el paciente se prepare para ello.

Antes de los dolores con cólicos biliares, pueden aparecer otros síntomas que pueden confundirse fácilmente con algunos problemas del tracto gastrointestinal, por ejemplo, intoxicación . Estos incluyen náuseas y vómitos repetidos, ininterrumpidos incluso con la devastación completa del estómago. Algunos pacientes, que no sospechan que este es el signo principal de cólico biliar, tratan de deshacerse del problema con la ayuda de los medios habituales (lavado del estómago, anguilas activadas, infusiones diversas, etc.), complicando la situación y retrasando el tiempo para un tratamiento adecuado.

Características de un ataque de dolor

El síntoma principal del cólico biliar es un síndrome del dolor, que tiene sus propias peculiaridades de manifestación, lo que facilita el diagnóstico. Entonces:

  1. Usualmente viene de noche cuando el paciente está en completo reposo.
  2. El dolor es significativamente peor cuando se inhala.
  3. Además, si el paciente gira sobre su lado izquierdo, sentirá un deterioro significativo.
  4. El dolor agudo debajo de la costilla derecha a menudo da en la espalda, el cuello y, por consiguiente, debajo del omóplato derecho, en algunos casos puede extenderse por todo el estómago, lo que obliga al paciente a recostarse del lado derecho con las rodillas flexionadas sobre las rodillas y las piernas hacia el abdomen.

Vale la pena señalar que tal convulsión requiere atención médica urgente. La admisión de analgésicos, si es posible, debe posponerse hasta la llegada de una ambulancia. De lo contrario, el diagnóstico de la condición puede ser difícil.