¿Cómo determinar que los colmillos comenzaron a entrar en erupción?
Según las observaciones de los pediatras, en promedio, el bebé puede ver los colmillos aproximadamente a los 16-22 meses, pero cualquier desviación de este intervalo también es una variante de la norma. Es poco probable que se pierda este evento trascendental, porque los síntomas del hecho de que los colmillos ya se están subiendo sobre el niño son bastante inequívocos:
- Copiosa saliva A veces, en este caso, su hijo debe usar un babero durante todo el día. En este caso, su pequeño hijo o hija constantemente dibuja cualquier objeto, tanto comestible como no comestible, en la boca, mordiéndolos y mordiéndolos. Esto se debe al enrojecimiento y la hinchazón de las encías, lo que hace que el pequeño sufra una gran incomodidad.
- Pobre apetito. De todos los síntomas de la erupción canina en los niños, esto es muy ambiguo, porque el hecho de que el bebé haya comido un poco y rechace incluso los platos favoritos, puede asociarse con otras enfermedades.
- Aumento de la temperatura En relación con el desarrollo del cuerpo de sustancias bioactivas especiales en el área de las encías, el niño suele mantener la temperatura de 37-38 grados durante al menos 1-2 días. En este caso, es necesario tener a mano medicamentos antipiréticos infantiles.
- Trastornos del tracto gastrointestinal. Cuando los niños se acercan a sus colmillos, los síntomas suelen ser vómitos, diarrea o, por el contrario, estreñimiento. La razón de esto es la salivación aumentada: desde
el bebé traga mucha saliva, ayuda a acelerar la motilidad intestinal. Sin embargo, si las heces líquidas se observan con más frecuencia de 2 a 3 veces al día y no duran un par de días, consulte a un médico para descartar una infección intestinal. - Tos mojada y secreción nasal. Este es uno de los síntomas más comunes del corte de colmillos de un niño. Por lo general, después de unos días, no queda rastro de ellos.
- Violaciones de comportamiento. Dependiendo de cuánto tiempo suban los colmillos del niño, tendrá que aguantar un sueño inquieto y el capricho excesivo de su bebé por un tiempo.