Contracciones durante el parto

El hecho de que el parto es un proceso difícil y doloroso, las mujeres aprenden en la infancia: las madres y abuelas, tías y hermanas mayores a menudo logran transmitir a la generación más joven toda la falta de atractivo del proceso del nacimiento de una persona. Esta información se instala en las cabezas jóvenes, y con el tiempo, el nacimiento comienza a asociarse con algo aterrador. Y la mayoría de las futuras madres temen el parto durante el parto, porque causan un dolor insoportable.

Periodicidad del trabajo de parto

Las contracciones durante el trabajo de parto son contracciones recurrentes del útero periódicamente. Su objetivo es abrir el cuello uterino del útero para garantizar que el bebé "salga a la luz". En el estado normal del útero, el útero se cierra herméticamente por el anillo muscular cervical, y en el parto se abre hasta 10-12 cm para pasar la cabeza del bebé. Después del trabajo de parto, el útero se contraerá a su tamaño original, "antes del embarazo".

Por supuesto, el trabajo intensivo de los músculos del útero en el parto no puede pasar desapercibido: una mujer siente dolor, que, como una ola, rueda y retrocede. Como regla, los combates comienzan gradualmente. Inicialmente, pueden tomarse como un dolor normal en la parte inferior de la espalda o dolor sordo en el abdomen, como en el caso de los trastornos digestivos. Sin embargo, con el tiempo, las sensaciones dolorosas se intensifican, las pausas entre ellos se contraen, las peleas son más bien dolores periódicos durante la menstruación.

Los médicos aconsejan a las futuras madres que tomen nota de la duración de las peleas y los intervalos entre ellas. Si la frecuencia de parto al nacer es de 10-12 por hora (es decir, cada 5-7 minutos), entonces es hora de reunirse en el hospital.

En las mujeres primíparas, el período de contracciones es de aproximadamente 12 horas. Si esta es la segunda entrega y la posterior, los ataques duran de 6 a 8 horas. Y cuanto más se abre el cuello uterino, mayor es la frecuencia de trabajo de parto durante el parto: al final del período los episodios se repiten cada 2 minutos.

¿Cómo facilitar las contracciones durante el parto?

Muchas mujeres han escuchado historias asombrosas sobre partos casi indoloros y a menudo se hacen la pregunta: "¿Hay nacimientos sin parto?" Por supuesto, no existen, porque las contracciones son una parte natural y necesaria del parto. La ausencia de trabajo de parto indica que algo salió mal y la situación requiere una intervención médica inmediata.

Sin embargo, algunas contracciones de las mujeres durante el parto producen un sufrimiento real. La causa puede ser un bajo umbral de dolor, miedo y mala conducta. Puede corregir la situación si se prepara para el parto con anticipación: asistir a la escuela de mujeres embarazadas, recopilar tanta información sobre el nacimiento como sea posible, aprender métodos de anestesia y relajación, y dominar la técnica de la respiración durante el trabajo de parto y el parto.

Es imposible controlar las peleas, y esto es lo que asusta a las futuras madres que ingresan primero al sacramento del parto. Sin embargo, es posible aliviar la condición de la mujer parturienta por los siguientes métodos:

  1. Al comienzo del trabajo de parto, cuando las luchas aún son débiles, trate de dormir o al menos recuéstese, completamente relajado. Esto le permite ahorrar fuerza y ​​calmarse.
  2. En peleas tangibles, es mejor moverse: caminar por la habitación, balancear la pelvis. La divulgación del cuello uterino en este caso se acelera.
  3. Encuentre una posición conveniente en la que la pelea se tolere más fácilmente: párese a cuatro patas, colóquese alrededor del cuello de su esposo (si está con usted), acuéstese de costado o siéntese en una silla mirando hacia atrás.
  4. Si las aguas aún no se han agotado, tome un baño o una ducha tibia.
  5. Masajea el área sacra.
  6. Intenta relajarte en la cima de la pelea.
  7. Respire a la derecha: la lucha comienza y termina con una respiración profunda, exhalación, en la cima de la pelea, respire profundamente y exhale algunas pocas veces. En los combates difíciles de controlar, la superficie y la respiración frecuente ayudarán.
  8. Si el dolor se vuelve intolerable, solicite al médico que le administre un anestésico.

Y, tal vez, el consejo principal: ¡no tengas miedo! El parto no es una tortura, pero el gran trabajo de una mujer, el cumplimiento de su misión en la Tierra, es el nacimiento de una nueva vida. Y la recompensa por este trabajo será el primer llanto de tu bebé y sin ningún sentimiento incomparable de amor y felicidad: eres tu mamá.