Pulpitis fibrosa crónica

El tratamiento inadecuado o inadecuado de las enfermedades orales, o su ausencia completa, puede conducir al desarrollo de una patología como la pulpitis fibrosa crónica. La enfermedad no presenta síntomas muy pronunciados: sensación de pesadez e incomodidad en el área del diente dañado, ataques raros de dolor a corto plazo en contacto con sustancias frías o calientes, masticación de alimentos sólidos. Debido a esto, los pacientes recurren al dentista solo durante los períodos de recaída o en las etapas avanzadas de la patología.

Síntomas de la exacerbación de la pulpitis fibrosa crónica

Cuando la enfermedad en cuestión está progresando y se establece su recurrencia, se observan los siguientes síntomas:

Diagnóstico diferencial de la pulpitis fibrosa crónica

Los síntomas anteriores pueden parecerse a otras enfermedades de la cavidad oral, por lo que para confirmar el diagnóstico, el dentista realiza no solo un examen especial, sino también los siguientes estudios:

Tratamiento de la pulpitis fibrosa crónica

La terapia de esta patología se lleva a cabo exclusivamente quirúrgicamente, lo que implica la eliminación de la pulpa (amputación o extirpación).

La intervención quirúrgica se puede realizar por métodos vitales y vitales. Se le da preferencia a este último debido a su menor traumatismo. Además, la versión vital del tratamiento quirúrgico le permite restaurar la parte de la corona del diente en solo 2 visitas al dentista.