Ruptura del tendón de Aquiles

Todo el mundo conoce la antigua leyenda griega del talón de Aquiles, probablemente, y dio el nombre del tendón, ubicado debajo del músculo gastrocnemio. Conecta los músculos del pie con el pie (específicamente con el hueso del talón) y es el más grande en todo el cuerpo, por lo que es bastante fácil lesionarlo.

La ruptura del tendón de Aquiles ocurre con mayor frecuencia en:

La lesión puede ser de 2 tipos:

Síntomas de la ruptura del tendón de Aquiles

Si le golpearon en el momento en que está tenso y tensado, notará una ruptura inmediatamente, pero si hubo una lesión indirecta (al saltar, en la postura inicial o resbaló en las escaleras), es posible determinar que la ruptura del tendón de Aquiles se produjo de acuerdo con dichos signos:

Las consecuencias de la ruptura del tendón de Aquiles

Dado que el mecanismo de interacción entre el músculo gastrocnemio y el pie se altera, dará lugar al hecho de que la persona no podrá caminar, incluso si no experimenta dolor, y el pie continuará moviéndose, pero con la menor carga o movimiento incorrecto todo puede deteriorarse bruscamente.

Por lo tanto, en caso de sospecha de ruptura o rotura (rotura parcial) del tendón de Aquiles, es necesario consultar a un traumatólogo o cirujano. Para el diagnóstico, ciertas pruebas generalmente se llevan a cabo:

En algunos casos, harán una radiografía, ultrasonido o MRI.

Con base en los resultados de los exámenes del tendón dañado, el médico prescribe el tratamiento necesario.

Tratamiento de la ruptura del tendón de Aquiles

El objetivo del tratamiento es conectar los extremos del tendón y devolver la longitud y la tensión necesarias para el funcionamiento normal del pie. Esto puede hacerse de una manera conservadora o quirúrgica.

El método de tratamiento conservador consiste en imponer durante un período de 6 a 8 semanas en la pierna lesionada de la estructura inmovilizadora. Puede ser:

La elección del método de fijación del pie depende del médico, es casi imposible determinar de forma independiente qué tipo de fijación es necesaria en su caso.

Un método más confiable para tratar la ruptura del tendón de Aquiles es una operación que implica unir los extremos. Tal intervención quirúrgica se realiza bajo anestesia local o general con varias suturas, cuya elección depende de la condición del tendón en sí, la duración de la ruptura y la aparición de casos repetidos.

Si desea curar una antigua ruptura del tendón de Aquiles o continuar practicando deportes, entonces el más efectivo método será la operación.

Cualquiera que sea el método utilizado para tratar la ruptura del tendón de Aquiles, debe seguirse la rehabilitación, que consiste en:

Es más eficaz llevar a cabo un curso de rehabilitación en centros especializados, donde todo el proceso es supervisado por especialistas.