¿Cómo asar en el horno la tierra para las plántulas?

Hemos escuchado y leído muchas veces que antes de sembrar semillas para las plantas de semillero, la tierra debe descontaminarse, y se puede hacer de varias maneras. Uno de ellos se está asando en el horno .

¿Cómo calentar adecuadamente la tierra en el horno?

En este sentido, debe elegir la temperatura y el tiempo de procesamiento correctos, ya que puede excederse y, además de los hongos y las plagas, destruir todos los microorganismos útiles, haciendo que el suelo esté muerto y estéril.

Entonces, a qué temperatura y cuánto encender la tierra en el horno: la temperatura óptima es 70-90ºС, el tiempo es de aproximadamente media hora. Después de eso, el suelo necesita tiempo para reanudar el equilibrio normal de la microflora útil y solo luego usarlo para plantar.

Es importante saber cómo asar la tierra en el horno para las plantas de semillero: para esto, primero se tamiza, se humedece un poco, luego se vierte sobre una lámina de metal con una capa de aproximadamente 5 cm y se sumerge en un horno precalentado.

Remojar el suelo es una versión ligeramente modificada de la calcinación. En este caso, el suelo se coloca en una manga para hornear y luego se envía al horno. Al mismo tiempo, la humedad se retiene en el suelo y, además, hay un efecto de vapor con agua hirviendo, ya que la humedad en el suelo se calienta hasta 90-100 ° C y, actuando sobre ella, limpia y desinfecta más.

¿Necesito quemar la tierra para las plántulas?

La desinfección del suelo es casi la clave para el crecimiento de las plántulas. De la desinfección adecuada del suelo, la salud de las plántulas futuras y las plantas adultas depende directamente. La calcinación realizada correctamente mata bacterias patógenas, nematodos peligrosos, huevos y pupas de insectos, esporas de hongos. Además, así es como luchamos de antemano con la "pierna negra", un peligroso enemigo de las plántulas.

Como puede ver, no debemos descuidar esta etapa, por lo que en el futuro no será posible tratar y no descartar con pesar las plántulas cultivadas con amor.