Hace mucho tiempo, la gente creía que el tiempo estaba gobernado por los dioses, por lo que los reverenciaban y regularmente los sacrificaban. Cada nación tenía su propia deidad específica.
El dios egipcio del tiempo
Estaba gobernando no solo el tiempo, sino también la luna, la escritura y la ciencia. Los animales sagrados para Thoth eran el ibis y el babuino. Es por eso que esta deidad fue representada como una persona, pero con la cabeza de ibis. En sus manos podría tener papiro y otros objetos de escritura. Los egipcios creían que con la aparición de Thoth, el Nilo se inundó. El primer mes en el calendario fue dedicado a este dios del tiempo. Fue considerado el patrón de longevidad , herencia, medida y peso.
Dios del tiempo con los eslavos
Chernobog era el gobernante de Navi. Los eslavos lo consideran el creador del mundo. Este dios del tiempo fue representado en dos formas. Podía aparecer en la imagen de un anciano encorvado con una larga barba. Se destacó con su bigote plateado y un palo torcido en sus manos. Representaban a Chernobog como un delgado hombre de mediana edad con túnica negra y bigote plateado. Este dios eslavo puede cambiar el flujo del tiempo. En su poder era detenerlo, acelerar o dar marcha atrás. Él puede aplicar sus habilidades , tanto a toda la tierra, como a una persona en particular.
El dios griego del tiempo
Kronos o Chronos es el padre de Zeus. Él tiene la capacidad de controlar el tiempo. De acuerdo con los mitos de las reglas de Kronos en el espacio y durante este tiempo las personas vivían felices y no necesitaban nada. En numerosas fuentes, el dios del tiempo en la mitología griega se representa como una serpiente, y la cabeza podría tener la apariencia de diferentes bestias. Las pinturas más recientes representaban a Kronos en la forma de un hombre de edad con un reloj de arena o una guadaña.
Dios del tiempo con los romanos
Saturno originalmente fue considerado un dios campesino, pero después de que los romanos comenzaron a considerarlo el gobernante de la época. Él representa un hombre sombrío y cojo que está constantemente al acecho. Su principal atributo es la brújula, por la cual mide el tiempo.