Empatía en psicología

La empatía en psicología es un concepto muy complejo y multifacético, lo que significa una empatía tan profunda, que raya en la identificación completa de uno mismo con otra persona. Si durante la conversación una persona puede completamente, en todos los tonos experimentar las mismas emociones que su interlocutor, esto significa que tiene una gran capacidad de empatía.

Empatía en la comunicación

No todos tienen un profundo sentido de empatía, pero a veces tenemos que mostrarlo. Las reglas del buen tono nos obligan a mostrar empatía: asentir, hacer una expresión apropiada en una conversación, etc. La empatía sincera generalmente ocurre entre dos personas cercanas y le permite sentir una comprensión mutua.

En psicología, hay dos tipos de empatía: puede ser emocional y cognitiva. La empatía emocional es la capacidad de empatizar con una persona en un nivel sensual, y esta es una empatía muy profunda. La especie cognitiva permite, a través del pensamiento lógico, comprender lo que una persona siente en ese momento, y mediante este enfoque a la verdadera empatía.

En la comunicación secular, no es tan importante qué tipo de empatía se involucra en la comunicación, pero entre dos personas cercanas, la capacidad de empatía emocional es muy apreciada, porque cada persona quiere ver cerca de uno mismo que realmente entienda sus emociones y sea capaz de empatía.

Niveles de empatía

La empatía es un concepto multifacético, y dentro de sí mismo tiene tres subdivisiones en niveles. Considérelos en orden.

Es fácil adivinar que la empatía y la simpatía están estrechamente relacionadas. Nos acercamos a las personas que nos entienden bien y rechazan a los que no nos pueden entender. Cada persona busca ver cerca de él a esos amigos que lo entenderán, como él mismo.

Ejercicios para la empatía

Hay ejercicios especiales que te permiten desarrollar empatía. Vamos a dar algunos ejemplos:

Adivina la sensación. La gente recibe tarjetas en las que se indica el sentimiento, y de pie de espaldas a los espectadores, necesitan representarlo sin palabras. Las cartas pueden ser tales: enojo, tristeza, miedo, impaciencia, alegría, sorpresa, ansiedad, etc. Al final es necesario analizar, como fue posible adivinar, sin ver la cara.

Carrusel. Los miembros del grupo se paran en dos círculos: el móvil inmóvil y el móvil externo: este es el carrusel. Cada vez que la comunicación Por lo tanto, se realiza con diferentes personas, a la señal que el círculo externo hace un paso a un lado y los pares cambian los pares. Se sugiere representar tales situaciones (para cada uno de 2 a 3 minutos):

  1. Delante de usted hay una persona a la que conoce, pero que no ha visto durante mucho tiempo. Estás contento con esta reunión.
  2. En frente de ti es un extraño. Encuéntralo ...
  3. Antes de que usted sea un niño pequeño, tenía miedo de algo. Acércate a él y cálmate.

Esos ejercicios simples en grupos permiten desarrollar empatía y hacer que una persona sea más abierta a los demás.