La represión es un tipo de mecanismo de protección que funciona contra los deseos y sentimientos poderosos. A menudo impide por completo la percepción de deseos que son inaceptables para la conciencia.
La represión en psicología no es un proceso fácil. En general, es un proceso de dividir la mente humana en dos partes: la consciente y la inconsciente. El mecanismo de protección por represión funciona de la siguiente manera: la mitad consciente de la mente no percibe lo inaceptable y ni siquiera sospecha su existencia, mientras que el inconsciente almacena cuidadosamente en sí mismo sentimientos violentos por la conciencia. El material almacenado en nuestra memoria se filtra y el que cae en la parte inconsciente de él es, por así decirlo, provisto con una señal de advertencia: "¡Cuidado! La experiencia o el conocimiento de este material pueden tener un efecto traumático sobre usted ".
La protección psicológica por represión inicialmente puede parecer contradictoria e incluso absurda, porque es imposible saber si una persona realmente siente algo o no, si afirma que no tiene absolutamente ningún sentimiento de ese tipo. Sin embargo, el desplazamiento es un mecanismo poderoso y solo se puede concluir que hay un observador externo.
Desplazamiento de Freud
Las ideas de Freud sobre el efecto de la represión se encuentran en la base de todo el psicoanálisis. Inicialmente, Freud sugirió que el desplazamiento
La represión existe en el estado inconsciente y, por lo tanto, es simplemente imposible deshacerse de ella. Para mantenerlo, necesita una cierta cantidad de energía, que suprime el deseo de descargar. Para que no tenga un estado neurótico que aparece debido a la falta de energía, descanse más y no exagere su cuerpo. Y también siempre recuerde que para mantener su estado consciente e inconsciente en la norma, no solo necesita descarga física, sino también emocional.