Fiebre del heno

La rinitis alérgica que ocurre estrictamente en un momento determinado (estacionalmente) debido al inicio de la polinización de las plantas se llama polen, aunque se la conoce mejor como fiebre del heno. El estudio de esta enfermedad comenzó ya en el siglo 19, en este momento se generalizó debido a la falta de conocimiento médico sobre la naturaleza de las alergias.

Polinosis o fiebre del heno?

Alrededor del 15% de la población mundial se ve afectada en el mundo moderno de la enfermedad en cuestión. Este es un indicador considerable, dado el progreso en medicina y las medidas anuales para reducir el número de plantas con histaminas.

La membrana mucosa, que recubre la cavidad nasal, cuando entra en pequeñas partículas de polen (no más de 0.04 mm), comienza a inflamarse. Una mayor diseminación del alérgeno a los bronquios conduce a un aumento en la reacción de inmunidad del cuerpo y la aparición de signos pronunciados de polen.

Fiebre del heno: síntomas y tratamiento

Las manifestaciones de la enfermedad se desarrollan rápidamente y aproximadamente en la misma época del año. Además, la rinitis alérgica siempre va acompañada de reacciones de la piel, las vías respiratorias inferiores y el sistema nervioso.

Síntomas de la fiebre del heno:

Antes de comenzar a tratar la fiebre del heno, debe establecer un diagnóstico preciso. Los más informativos para hoy son las pruebas de trazado. Para una mayor seguridad del análisis es deseable cumplir sin tomar antihistamínicos. El estudio consiste en el daño a la piel con algunos rasguños superficiales en el antebrazo y la aplicación de alérgenos a la herida. La presencia de polinosis se manifestará como la formación de ampollas alrededor del arañazo y un enrojecimiento notable. Cabe señalar que las pruebas de escarificación se realizan estrictamente bajo la supervisión de un médico para evitar el desarrollo de reacciones anafilácticas.

Otro método de diagnóstico es un análisis de sangre de laboratorio con la determinación de la cantidad de anticuerpos específicos contra el alergeno.

La única manera efectiva de eliminar los síntomas de la polinosis es el tratamiento con antihistamínicos. Desafortunadamente, esto no aliviará la enfermedad para siempre, pero solo ayudará a aliviar la condición de una persona hasta que la temporada de floración y polinización de las plantas se detenga y la alergia no desaparezca por sí sola.

Fiebre del heno: tratamiento alternativo y prevención

Una de las direcciones prometedoras en el tratamiento de la enfermedad descrita es la inmunoterapia con alérgenos. Especificidad es la introducción constante de histamina en la sangre del paciente durante varias semanas con un aumento gradual de su concentración. Por lo tanto, se inicia el proceso de desensibilización, reduciendo la sensibilidad del organismo y sus mecanismos de protección al contacto con el alergeno. La inmunoterapia es recomendable comenzar mucho antes de la época de floración y continuar durante un año. Este método es efectivo en más del 80% de los casos de fiebre del heno.

La prevención de la fiebre del heno implica la exclusión de todos los contactos posibles con el alergeno, así como la toma de medicamentos recetados por el especialista en tratamiento.