Psicoterapia cognitiva

Todos están expuestos al estrés , en la oficina, en el hogar, en la tienda y en la carretera. Las formas de hacer frente a las experiencias, también, son todas diferentes: quién golpea una pera en el gimnasio, quién llora por una copa de vino a un amigo, y alguien se cierra en sí mismo, sin dejar salir las emociones. Tales personas a menudo se convierten en clientes de psicoterapeutas, porque no pueden hacer frente solo a las tensiones y sus consecuencias. Para ayudar a las personas a resolver las contradicciones existentes, se utilizan varios métodos, y uno de los más interesantes, que combina los principios de diferentes escuelas es la psicoterapia cognitivo-conductual.


Fundamentos del método

El enfoque fue inventado por Aaron Beck, quien sugirió que surgen muchos problemas de personalidad como resultado de un autoconocimiento incorrecto y basados ​​en estas emociones negativas. Por ejemplo, una persona cree que no puede hacer nada bien y omite todos sus pensamientos y acciones a través del prisma de esta creencia, y por lo tanto la vida se percibe como una serie interminable de sufrimiento. Usando la psicoterapia orientada al conocimiento, un especialista puede descubrir la razón de esta autoconciencia y ayudar a revisar la actitud hacia uno mismo. El resultado del trabajo será la capacidad de evaluarse objetivamente, evitando pensamientos negativos "automáticos". La eficacia rápida y una amplia gama de herramientas han hecho que el enfoque cognitivo sea frecuente en la psicoterapia de la depresión . Con el tiempo, se hizo evidente que la cognición (fantasía y pensamiento) de una persona puede ser no solo la causa de la depresión, sino también problemas personales más serios, lo que hace que el enfoque sea aplicable para su tratamiento.

Psicoterapia cognitiva de los trastornos de la personalidad

A pesar de la efectividad de las técnicas desarrolladas para el tratamiento de la depresión, no fueron adecuadas para trabajar en condiciones más severas. Por lo tanto, para el propósito de la psicoterapia cognitiva de los trastornos de personalidad, se han creado otros métodos, y para cada enfermedad específica hay un conjunto de herramientas. Por ejemplo, en caso de tratamiento de alcoholismo, drogadicción y otras adicciones, los pensamientos de la persona con respecto a su apego se corrigen y se reorientan a formas de obtener placer en formas más naturales: crear una familia, construir una carrera, comprar una casa, restaurar la salud, etc. La psicoterapia cognitivo-conductual del trastorno de personalidad obsesivo-compulsivo requerirá el uso de la técnica de "4 pasos" de Jeffrey Schwartz, que permitirá detectar pensamientos obsesivos, comprender su causa y reconsiderar sus puntos de vista sobre ellos mismos. Además, el enfoque hace que sea posible trabajar eficazmente con los trastornos límite y la esquizofrenia. Pero la psicoterapia cognitivo-analítica no es omnipotente y en los trastornos graves no reemplaza el tratamiento médico, sino que lo complementa.