La mastitis es una inflamación infecciosa del seno. La mastitis asociada con la lactancia materna se llama lactancia y es más común en las madres primíparas.
Causas de la mastitis
La principal causa de mastitis en una mujer lactante es una disminución de la inmunidad. En este contexto, cualquier enfermedad, desde una pielonefritis crónica hasta un resfriado leve, puede provocar un proceso inflamatorio en la glándula mamaria. La infección puede penetrar en el cuerpo y a través de las grietas en los pezones, que aparecen cuando el niño se aplica incorrectamente al cofre. El estancamiento de la leche (lactostasis) también puede provocar el desarrollo de mastitis.
¿Cómo identificar la mastitis?
Hay tres etapas de la enfermedad: serosa, infiltrativa y purulenta.
La etapa inicial o serosa de la mastitis se puede reconocer por los siguientes síntomas:
- un fuerte aumento de la temperatura a 38-39 grados Celsius;
- escalofríos;
- dolor en la glándula mamaria;
- enrojecimiento de la piel sobre el área afectada.
Con la forma infiltrante de mastitis, puede estar preocupado:
- intoxicación general del cuerpo (debilidad, estado de influenza);
- absceso denso y doloroso (infiltrado) en la glándula mamaria afectada;
- el aumento y el dolor de los ganglios linfáticos en las axilas;
- una mala salida de leche.
Los signos de mastitis purulenta, la forma más grave de inflamación, son:
- piel roja o azulada brillante por encima del absceso;
- pecho edematoso y doloroso;
- ablandamiento de tejidos en focos purulentos;
- escalofríos y fiebre a 40 grados Celsius;
- estado de influenza;
- leche con secreción purulenta o de color desigual (sobre un fondo blanco, se ven venas purulentas oscuras).
¡Importante! A veces se puede desarrollar una forma purulenta de mastitis y a baja temperatura.
El tratamiento de la mastitis en mujeres lactantes
Si sospecha que tiene una mastitis, necesita ver a un médico: un cirujano, un especialista en lactancia o un ginecólogo. Se le ofrecerá realizar pruebas (estudio microbiológico de la leche, un análisis general de sangre y orina) y prescribir un curso de antibióticos y procedimientos fisioterapéuticos (UHF, irradiación UV). En el caso de la mastitis purulenta, se realiza una operación.
Lactancia materna con mastitis
En una etapa temprana de la enfermedad, la lactancia es necesaria para prevenir el estancamiento de la leche. Cuando la forma infiltrante debe consultar con un médico y recoger medicamentos que son compatibles con la lactancia materna.
Con la mastitis purulenta, es necesario dejar de amamantar por un tiempo, continuar la extracción de la leche con las manos o el extractor de leche. En algunos casos, se le puede recomendar que suprima la lactancia.
Prevención de la mastitis
En las primeras semanas de la vida del bebé, observe las siguientes reglas simples que ayudarán a prevenir la mastitis de la lactancia:
- Asegúrese de que durante la alimentación el bebé esté apropiadamente
Agarró el pezón (junto con la areola), y su barbilla apuntó hacia el estancamiento de la leche. - Alimente al bebé a pedido. Si la leche es demasiado, decante.
- Una ducha diaria y lavarse los senos con agua limpia antes de cada alimentación ayudará a prevenir la infección. No use jabón con frecuencia: seca la piel sensible de los pezones y puede provocar la aparición de grietas.
- Si los pezones tienen grietas, después de alimentarlos, lubríquelos con espino cerval de mar o aceite de rosa de perro. Crema de cicatrización bien herida Bepanten. Puede tratar el área afectada con un verde (tenga cuidado, seca la piel).
- Coma bien: en su dieta debe consumir muchas frutas y verduras (por supuesto, compatibles con la lactancia materna).
- Trate de no comenzar la enfermedad, inicie el tratamiento a tiempo y tráigalo hasta el final.