Hasta la fecha, el cáncer gástrico es el tipo más común entre las enfermedades del cáncer. Por lo general, se disemina con bastante rapidez y puede afectar el esófago, el hígado, los pulmones y otros órganos estrechamente relacionados. Es por eso que una dieta para el cáncer de estómago es una necesidad que no debe descuidarse en ningún caso.
Dieta para el cáncer de estómago y pancreático
La dieta para pacientes con cáncer sugiere una lista bastante grande de alimentos que deberían excluirse de la dieta. Estos incluyen:
- todo tipo de caldos fuertes de carne, champiñones y pescado;
- cualquier plato cocinado en una sartén o frito: freír está contraindicado;
- cualquier carne, pescado, champiñones, salsas de tomate y aditivos;
- todo tipo de productos ahumados;
- cualquier encurtido;
- Productos que contienen muchas fibras gruesas;
- todo tipo de comida enlatada;
- frutas y bayas inmaduras;
- alcohol en todo tipo;
- grasas de origen animal;
- bebidas carbonatadas y café.
La dieta con cáncer parece bastante estricta, pero, sin embargo, hay una lista muy voluminosa de alimentos que se pueden comer. La dieta para la enfermedad del cáncer recomienda los siguientes alimentos y platos para comer:
- sopas de verduras en un caldo débil frotado o aplastado en una licuadora;
- gachas líquidas, muy hervidas (permitidas y limpiadas);
- soufflé de carne o pescado (los productos precocinados se muelen con una licuadora);
- todo tipo de puré de patatas vegetales;
- cualquier sopas de cereales mucosas;
- tortillas, huevos al vapor o hervidos;
- requesón fresco rallado (no ácido);
- pan de trigo (ayer o seco);
- varias sopas de leche;
- puré de frutas y bayas, mousse, jalea, kissel;
- agua mineral por recomendación de un médico;
- té débil, es posible con leche;
- mantequilla vegetal y fresca.
Si sigue esta dieta, el cáncer no será demasiado perturbador y causará malestar general. En este caso, no olvide que la comida debe dividirse: porciones pequeñas de 200-300 gramos 5-6 veces al día.
Cáncer de estómago: dieta después de la cirugía
Después de la cirugía, cualquier alimento ingresará rápidamente al intestino delgado, lo que ocasionará náuseas o vómitos de vez en cuando. Si la incomodidad es muy grave, debe comer mientras está acostado, o al menos acostarse inmediatamente después de comer. En general, las recomendaciones siguen siendo las mismas: solo debe comer alimentos suaves, bajos en grasa y machacados cada dos horas. Además, siempre debe olvidarse de cualquier producto que contenga azúcar.