Nutrición para la cirrosis del hígado

El hecho de que las cosas son malas para el hígado, la gente a menudo descubre que es demasiado tarde, porque "permanece en silencio" hasta el final, canalizando todas sus reservas curativas para nuestra salvación.

Causas de la cirrosis

Uno de los terribles recordatorios de los problemas es la cirrosis del hígado , que surge como resultado de la hepatitis crónica, la intoxicación sistemática, incluido el alcohol, que conduce a un trastorno metabólico grave en el cuerpo.

El tratamiento, por lo general, dura mucho tiempo, pero el efecto curativo se puede lograr no solo tomando medicamentos, sino también manteniendo un estilo de vida saludable, incluso organizando una nutrición adecuada.

¿Cómo organizar las comidas?

La nutrición para la cirrosis hepática tiene sus propias características y se debe a una dieta moderada para restaurar parcialmente la función de este importante órgano.

Para la organización de una nutrición adecuada con cirrosis, es necesario consultar a un médico y un dietista. Pero incluso antes de referirse a especialistas, vale la pena recordar que hay reglas generales que deben conocerse e implementarse.

Se recomiendan cinco comidas al día a intervalos de tres horas. En este caso, la primera comida debe ser a las 8-9 de la mañana y la última, no más tarde de las 10 de la noche.

¿Qué alimentos no deberían consumirse?

Para combatir con éxito la enfermedad requiere una nutrición adecuada en la cirrosis del hígado. ¿Qué significa esto?

Durante el período de tratamiento, no se recomienda consumir una gran cantidad de grasa, es decir, la dieta deberá excluir la grasa, la carne y el pescado grasos, así como los caldos de los mismos. No te dejes llevar por las especias y especias, los frijoles, los vegetales amargos y las frutas. Además, deberá abandonar los alimentos enlatados y las salchichas, así como los alimentos fritos.

¿Qué puedes comer?

La restauración parcial de la función hepática requiere un estilo de vida saludable. El éxito en el tratamiento de la cirrosis hepática puede lograrse si se proporciona la nutrición necesaria y se utilizan los productos apropiados.

No dañará el trigo y el pan de centeno de la cocción de ayer, la leche agria y dulce, la pasta, los cereales, e incluso una pequeña cantidad de mantequilla y aceite vegetal no hará daño.

Ya sabemos que la cirrosis del hígado se trata con más éxito si se observa la dieta, y la comida incluye solo platos que son útiles en este período. Entre ellos: sopas de verduras sin carne, guisos de cuajada, chuletas de vapor de zanahoria y col, puré de papas, dulces con leche, té con leche.

Lo principal en la lucha contra esta enfermedad es el deseo del paciente de volver a una vida plena.